Pain Killer Es una obra en la cual gente lleva muchísimos años jugando. Basado en un mundo fantástico medieval con un toque épico ha sido el entretenimiento de muchas personas durante mucho tiempo. |
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Primer evento : Prologo de una guerra
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Aleishe
Lans Tartare
NPC
7 participantes
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Una vez todos los presentes sentados, reunidos entrada la madrugada para tratar los asuntos más recientes, la joven Lynsah miró a todos los asistentes que se encontraban en aquella mesa, a algunos podía reconocerlos, pero a otros no conseguía situarlos. Aunque en esos momentos no tenía demasiada hambre, por educación se sirvió un poco de comida antes de que comenzaran a hablar de aquello que correspondía y por lo cual estaban allí. Cuando comenzaron a hablar, de manera ordenada, la ojiverde prestó mucha atención a cada uno sin perderse ni un solo detalle, pues estaba deseosa de conocer cuanto ocurriese. Como había podido imaginar desde un principio, a pesar de todo y del supuesto apoyo del sur y todas las personas que acababan de llegar, nadie podía bajar la guardia.
Después, pero sin quitar nada de su atención, escuchó las palabras del obispo y del maestro de armas, que también eran importantes en esos momentos. Cuando se volvió a hacer el silencio Lynsah probó alguna de las cosas que había en su plato, despacio y saboreando cada bocado, como le habían enseñado desde pequeña por etiqueta y posición social, pero paró al ver que se volvía a iniciar la conversación y se puso en pie tal como se le indicaba y esperó a que salieran todos los allí presentes para acercarse a los que quedaron allí.
-¿Ocurre algo?-Pronunció la joven, ya que se le había pedido que se quedara y supuso que era para tratar algún tema
Después, pero sin quitar nada de su atención, escuchó las palabras del obispo y del maestro de armas, que también eran importantes en esos momentos. Cuando se volvió a hacer el silencio Lynsah probó alguna de las cosas que había en su plato, despacio y saboreando cada bocado, como le habían enseñado desde pequeña por etiqueta y posición social, pero paró al ver que se volvía a iniciar la conversación y se puso en pie tal como se le indicaba y esperó a que salieran todos los allí presentes para acercarse a los que quedaron allí.
-¿Ocurre algo?-Pronunció la joven, ya que se le había pedido que se quedara y supuso que era para tratar algún tema
Invitado- Invitado
Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Pidieron una canción. Es impresionante como en los momentos mas inoportunos, con las temperaturas mas inconcebibles, en los lugares menos racionales, la gente quiere oír canciones... Pero bueno, ellos son los que tienen las lanzas. Ante esta petición, no tuve mas remedio que descolgar el laúd de mi hombro, sacarle un poco la suciedad del viaje, y comenzar a tocar una suave melodía, mientras entonaba los siguientes versos:
Una vez finalizada la canción, volví a su posición el laúd, mientras les decía: -"Mis buenos soldados, espero que esa canción les haya sido de agrado. Debo pedir disculpas por el hecho de que no la sepa en nuestro idioma, pero créanme cuando les digo que es una canción acorde a mi situación... Ahora, les pregunto: ¿Puedo pasar?"-
"The Road goes ever on and on
Down from the door where it began.
Now far ahead the Road has gone,
And I must follow, if I can,
Pursuing it with weary feet,
Until it joins some larger way,
Where many paths and errands meet.
And whither then? I cannot say."
Down from the door where it began.
Now far ahead the Road has gone,
And I must follow, if I can,
Pursuing it with weary feet,
Until it joins some larger way,
Where many paths and errands meet.
And whither then? I cannot say."
Una vez finalizada la canción, volví a su posición el laúd, mientras les decía: -"Mis buenos soldados, espero que esa canción les haya sido de agrado. Debo pedir disculpas por el hecho de que no la sepa en nuestro idioma, pero créanme cuando les digo que es una canción acorde a mi situación... Ahora, les pregunto: ¿Puedo pasar?"-
Invitado- Invitado
Re: Primer evento : Prologo de una guerra
-Hermosa luna. Eso fue lo único que salio de los labios de aquella monja que caminaba lentamente bajo el amparo nocturno, un poco de humo salio de su boca a causa de la helada temperatura, pero ello no era capaz de mermar ese constante y fantasmal paso. Unos segundos y poco mas mantuvo sus esmeraldas ojos clavados en el cielo, antes de enfocar su mirada en la ciudad que finalmente dejaba de esconderse en la bruma y la oscuridad de esa aciaga noche. Si se lo preguntaran ella diría que esa noche tenia sabor a mal presagio, uno que seguro traería miedo, el cual a su vez trae ira, y odio al final. Si, ella sabia que en Asbru las cosas se pondrían realmente feas, y cualquiera que se acercara a ese lugar debería tener una muy buena excusa para ir a meter las manos al nido de avispas, pero bueno, ella la tenia.
-Que sea la voluntad del Creador. Se dijo a si misma en voz baja, suspirando profundamente a la vez que metía las manos en su chaqueta de cazadora, como toda buena matona. De ahora en adelante debía ser mas cuidadosa, si bien su actuar estaría respaldado por la misión que llevaba a cabo, un movimiento en falso podría desencadenar cosas que ninguna excusa floja podría cubrir, y bien que ella era una experta en movimientos en falso. No le llevo mucho tiempo alcanzar la entrada a la pequeña ciudad...bueno, quizás no era tan pequeña, pero comparada con aquellas del Puño de Hierro esa de ahí no era mas que un pañuelo, pero igual también se le puede decir acogedora, no? mas aun cuando la temperatura es suficiente para convertir la hierba en trapitos de cristal.
Lo mas notable a primera vista era la gran actividad militar que envolvía a la masa de luces de la ciudad, tal parece que el Sumo Sacerdote no bromeaba con eso de que "en Asbru se cocía algo grande", aunque desafortunadamente no se le entregaron mas detalles, mas culpa de ella que de alguien mas, pero en fin, no hubiera valido nada esperar a tener hecho concretos, la cosa se ponía caliente ahora mismo y no había nada que un bardo de taberna no pudiera contar. Finalmente después de un rato logro alcanzar la entrada de la ciudad, la cual por cierto estaba resguardada por dos fornidos hombres ataviados con armadura y lanza, un atraso a decir verdad, pero no se les podía culpar, esta era la hora para la cual los soldados eran entrenados, y el paso de intrusos no debería ser bien recibido.
-Hermana Florian Vakarian de Torquemada, vengo por parte del clero del Puño de Hierro y tengo un par de asuntos en la iglesia...puedo pasar? Paciencia jamas fue su segundo nombre, por lo que al llegar ni siquiera espero a que preguntaran por su nombre, sino que simplemente se presento, con una actitud mas bien cortante, y una cortesía muy mal simulada, sus manos seguían dentro de su chaqueta y su semblante estaba mas bien irritado. Mantuvo su mirada afilada, directo en los ojos de los dos guardias, dejando que el esmeralda de sus ojos cayera como espadas sobre los hombres, con una expresión que de alguna forma era atemorizante, intimidante...casi como si les fuera a hacer un agujero en el alma mientras estos no le permitieran el paso a la capilla.
-Que sea la voluntad del Creador. Se dijo a si misma en voz baja, suspirando profundamente a la vez que metía las manos en su chaqueta de cazadora, como toda buena matona. De ahora en adelante debía ser mas cuidadosa, si bien su actuar estaría respaldado por la misión que llevaba a cabo, un movimiento en falso podría desencadenar cosas que ninguna excusa floja podría cubrir, y bien que ella era una experta en movimientos en falso. No le llevo mucho tiempo alcanzar la entrada a la pequeña ciudad...bueno, quizás no era tan pequeña, pero comparada con aquellas del Puño de Hierro esa de ahí no era mas que un pañuelo, pero igual también se le puede decir acogedora, no? mas aun cuando la temperatura es suficiente para convertir la hierba en trapitos de cristal.
Lo mas notable a primera vista era la gran actividad militar que envolvía a la masa de luces de la ciudad, tal parece que el Sumo Sacerdote no bromeaba con eso de que "en Asbru se cocía algo grande", aunque desafortunadamente no se le entregaron mas detalles, mas culpa de ella que de alguien mas, pero en fin, no hubiera valido nada esperar a tener hecho concretos, la cosa se ponía caliente ahora mismo y no había nada que un bardo de taberna no pudiera contar. Finalmente después de un rato logro alcanzar la entrada de la ciudad, la cual por cierto estaba resguardada por dos fornidos hombres ataviados con armadura y lanza, un atraso a decir verdad, pero no se les podía culpar, esta era la hora para la cual los soldados eran entrenados, y el paso de intrusos no debería ser bien recibido.
-Hermana Florian Vakarian de Torquemada, vengo por parte del clero del Puño de Hierro y tengo un par de asuntos en la iglesia...puedo pasar? Paciencia jamas fue su segundo nombre, por lo que al llegar ni siquiera espero a que preguntaran por su nombre, sino que simplemente se presento, con una actitud mas bien cortante, y una cortesía muy mal simulada, sus manos seguían dentro de su chaqueta y su semblante estaba mas bien irritado. Mantuvo su mirada afilada, directo en los ojos de los dos guardias, dejando que el esmeralda de sus ojos cayera como espadas sobre los hombres, con una expresión que de alguna forma era atemorizante, intimidante...casi como si les fuera a hacer un agujero en el alma mientras estos no le permitieran el paso a la capilla.
Invitado- Invitado
Re: Primer evento : Prologo de una guerra
esos hombres, de los cuales al principio desconfiaba, se estaban ganando mi respeto, lo cual no significaba que me cayeran bien, pero si que los creia dignos de saber mi nombre.
-Jack dragomir ese es mi nombre,pero soy mas conocido como jack el largo,a mi tan bien me gustaría saber vuestros nombres.
les conteste de la forma mas convincente posible, la verdad sus nombres no me interesaban pero en esta situación creía conveniente ser educado, porque e lo mejor me podrían llevar ante alguien de alto cargo.
-otra cosa e de deciros, soy un vampiro, si como dicen las leyendas me alimento principalmente de sangre, pero por ello no os eis de asustar, me gustaría saber si por aquí cerca ay algún matadero o algún lugar donde pasar el dia sin que me de el sol, eso podría ser para mi fatal si me dijerais alguno de esos dos sitios os lo agradecería enormemente.
se lo dije como si fuera algo normal el encontrarse con un vampiro todos los días.
o máster todopoderoso y omnipresente se que no te e rezado mucho en estos años pero me gustaría que no me intentasen matar esta vez
rece en mi pensamiento
-Jack dragomir ese es mi nombre,pero soy mas conocido como jack el largo,a mi tan bien me gustaría saber vuestros nombres.
les conteste de la forma mas convincente posible, la verdad sus nombres no me interesaban pero en esta situación creía conveniente ser educado, porque e lo mejor me podrían llevar ante alguien de alto cargo.
-otra cosa e de deciros, soy un vampiro, si como dicen las leyendas me alimento principalmente de sangre, pero por ello no os eis de asustar, me gustaría saber si por aquí cerca ay algún matadero o algún lugar donde pasar el dia sin que me de el sol, eso podría ser para mi fatal si me dijerais alguno de esos dos sitios os lo agradecería enormemente.
se lo dije como si fuera algo normal el encontrarse con un vampiro todos los días.
o máster todopoderoso y omnipresente se que no te e rezado mucho en estos años pero me gustaría que no me intentasen matar esta vez
rece en mi pensamiento
Invitado- Invitado
Re: Primer evento : Prologo de una guerra
No dudo ni un momento Lans en agradecer en silencio las palabras del sumo sacerdote para con el, después de todo el príncipe de Asbru aun no ha renegado del todo de su fe. Al escuchar al sacerdote ya se pudo imaginar Lans a que se refiere, en especial cuando el hombre mayor fijo sus ojos en el unos momentos y luego en su preciada hija. Es posible que su padre lo entendiera también ya que no puso objeciones al respeto, ni a ese consejo y petición ni a los consejos de los demás allí presentes, esta mas que claro que necesitan la milicia y de mas hombres preparados para batallar en caso lleguen al conflicto armado. Al terminar de exponerse cada uno de ellos su padre el rey dio la orden de que se retiraran y se pongan los planes en marcha, todos menos la sangre de su sangre y Lynsah, la joven noble del Puño de Hierro y huésped de honor ha debido quedarse por ordenes del rey.
-Lady Lynsah, sera mejor que tome asiento, esto de seguro tomara algún tiempo mas, después de todo cuando mi padre ordena algo asi es porque tiene algunas ideas que exponer.- Llevo su mano izquierda a la cabeza de su hija para acariciarle la cabeza unos momentos antes de comenzar a hablar. -Veamos si puedo adivinar los pensamientos de mi padre...Si el maestro Wort no esta aquí es porque esta ya muy anciano como para exigirlo a estas horas de la madrugada...Y sin embargo, se permite a Lady Lynsah no solo participar en una reunión de emergencia sino que también se le permite tomar el asiento que le pertenece al maestro de la moneda ¿Acaso Lady Lynsah Carstiars se ha convertido en su apoderada y sucesora?- Toda una revelación tanto para Lynsah como para el mismo, pero su padre ha de tener motivos de suma importancia como para permitir que una invitada extranjera tome su lugar en su corte en una reunión de emergencia.- Suponiendo que haya dado en lo cierto, el maestro Wort tiene dos hijos y tres nietos ¿Aprueba esto el maestro de la moneda?- Con mucho interés el sucesor al trono pregunta directamente a su padre el rey sobre ese asunto tan importante para la región del Oeste.
-Dejando eso de lado, ahora toca hablar sobre mi hija. Claramente la única en nuestra familia de la que podemos disponer es de ella, supongo que en toda la región nadie le debe guardar rencor, sin mencionar que Shurelya es una niña muy apreciada, aun asi, el ir con el sacerdote o no me gustaría que fuera decisión de ella sin necesidad de forzar a nadie a una responsabilidad tan grande como la que se espera de ella.- Paso su brazo por los hombros de su hija y la trajo hacia en en un cálido abrazo protector. El que su hija tome responsabilidades reales e importantes le hará crecer como persona y regente eso es seguro, pero para un padre dejar que le alejen a su hija, a su única hija y como si le arrancaran el corazón de su propio pecho con las manos desnudas, algo muy difícil de aceptar y asimilar.
-Lady Lynsah, sera mejor que tome asiento, esto de seguro tomara algún tiempo mas, después de todo cuando mi padre ordena algo asi es porque tiene algunas ideas que exponer.- Llevo su mano izquierda a la cabeza de su hija para acariciarle la cabeza unos momentos antes de comenzar a hablar. -Veamos si puedo adivinar los pensamientos de mi padre...Si el maestro Wort no esta aquí es porque esta ya muy anciano como para exigirlo a estas horas de la madrugada...Y sin embargo, se permite a Lady Lynsah no solo participar en una reunión de emergencia sino que también se le permite tomar el asiento que le pertenece al maestro de la moneda ¿Acaso Lady Lynsah Carstiars se ha convertido en su apoderada y sucesora?- Toda una revelación tanto para Lynsah como para el mismo, pero su padre ha de tener motivos de suma importancia como para permitir que una invitada extranjera tome su lugar en su corte en una reunión de emergencia.- Suponiendo que haya dado en lo cierto, el maestro Wort tiene dos hijos y tres nietos ¿Aprueba esto el maestro de la moneda?- Con mucho interés el sucesor al trono pregunta directamente a su padre el rey sobre ese asunto tan importante para la región del Oeste.
-Dejando eso de lado, ahora toca hablar sobre mi hija. Claramente la única en nuestra familia de la que podemos disponer es de ella, supongo que en toda la región nadie le debe guardar rencor, sin mencionar que Shurelya es una niña muy apreciada, aun asi, el ir con el sacerdote o no me gustaría que fuera decisión de ella sin necesidad de forzar a nadie a una responsabilidad tan grande como la que se espera de ella.- Paso su brazo por los hombros de su hija y la trajo hacia en en un cálido abrazo protector. El que su hija tome responsabilidades reales e importantes le hará crecer como persona y regente eso es seguro, pero para un padre dejar que le alejen a su hija, a su única hija y como si le arrancaran el corazón de su propio pecho con las manos desnudas, algo muy difícil de aceptar y asimilar.
Lans Tartare- Mensajes : 376
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Localización : En el oeste de Asbru
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Comienzan en algún lugar del oeste las preguntas, pruebas y presentaciones para diferentes personas en parecidas circunstancias. Aquel hijo de la noche que maldito por los cielos camina por la tierra ha optado bien en no intentar pasar a escondidas, después de todo yendo por las buenas no obtendría malos resultados. Tras presentarse y pedir el nombre de aquellos que le reciben los soldados sonrientes responden.
-Mi santa madre me ha llamado Eddark al nacer, mi compañero es Francis. –Se presentan entre sonrisas aunque esas sonrisas mermaron al escuchar la condición de no muerto de aquel llamado Jack. – No sé si al príncipe le gustara mucho eso…Pero el maestro Noah por su parte no tendrá problemas en permitirte el ingreso al grupo de exploradores o ha algún otro lugar donde puedas ser de utilidad.-La mayoría conoce la triste historia de cómo la esposa del príncipe fue asesinada por vampiros antes de llegar siquiera a Asbru, el rencor de Lans Tartare hacia esa raza es enorme. Desde donde están reunidos esos soldados y el vampiro se pudo escuchar el bello cantar más alejados de ellos, como a unos 30 metros en dirección sur, al parecer los soldados se están divirtiendo de alguna manera ya que hasta música tienen. -Y nosotros aquí sin música ni chicas-Se queda de su suerte uno de los soldados mientras mas allá parecen apaciguarse los ánimos., al menos puede decir el vampiro que el Master ha escuchado sus plegarias, nadie ha intentado matarlo por su condición de no muerto, no al menos aun…
Otros soldados no muy lejos de allí aplauden la interpretación de Mulor y le miran con buenos ojos, el laúd junto a la voz del bardo fue suficiente como para convencer a esos hombres y ponerlos de su lado.
-Adelante muchacho, bienvenido a la ciudad del Oeste, espero que diviertas a la gente y te ganes tus buenas monedas-No lo detuvieron mucho mas y sin retraso le permitieron el paso a la villa cercana a al castillo del Oeste de Asbru. Mientras ese muchacho se adentra en la ciudad otra muchacha llega detrás de él y así también la detienen, incluso presentándose y explicando el que hace allí los soldados no le abrieron el paso, de hecho pareció que más de uno fuera a ensartarla en su arma de asta. Las lanzas se cruzaron una con otra en plena negativa, prácticamente como si no fuera bien recibida allí.
-Si claro, claro…Muéstreme sus papeles de viaje señorita Florian- Con un enojo evidente uno de los soldados exige a la mujer que muestre sus credenciales identificadoras, tanto de nombre como aquella que la habilita como parte del clero del Puño de Hierro.
En la entrada de la ciudad las cosas se pusieron tensas gracias a la monja que llega desde el Puño de Hierro, pero en la iglesia de la ciudad todo es armonía y emoción con el ángel allí presente al cual se le acerca mas y mas gente, haciendo así que el ego del ángel recupere su fuerza y llegue así nuevas fuerzas a su ser celestial. Con esas nuevas fuerzas es más fácil que haga uso de sus poderes y habilidades especiales, mas cuando los allí presentes no se asustan al ver sus ojos blancos, solo se impresionan mucho como cualquier persona común y corriente lo haría en una circunstancia como esa. Lo más sobrenatural que puede hallar el ángel en ese recinto es a la loba que cerca de la entrada de acurruca en sus mantas como si nada pasara, el resto de los allí presentes son personas normales sin ninguna clase de bendición en especial.
En el castillo del Oeste muchos ya se pusieron en marcha como lo han acordado ante el mismísimo rey de la región, aunque aún quedan bastantes asuntos por discutir en la corte del rey, y en esas discusiones tienen plena participación la familia del rey y la joven noble oriunda del Puño de Hierro Lynsah Carstair. La joven en cuestión permanece allí presente y escucha claramente lo que expone el príncipe Lans, también lo que ha dicho respecto a su preciada hija por la cual muestra claros signos de afecto. Ya sacando sus suposiciones y exponiendo los asuntos de importancia y sus preguntas sobre su propia hija y sobre la joven invitada en la región el príncipe guarda silencio para que así su padre y rey con sus propias palabras ponga las cosas en claro.
-Está más que claro que mi nieta es la mejor elección para que permanezca con el obispo Bishop, piénsalo bien hijo, ella es pequeña, ella es casi una nacida aquí en Asbru. Shurelya tiene mucho encanto y es más salvaje que cualquiera de nosotros, sin mencionar que los hombres de armas podemos dar seguridad pero a más de uno no les debe gustar la sangre o las decisiones que tomamos, por eso alguien limpio de esas cargas por completo será más que bienvenido entre el ciudadano común.- Bebe algo de vino el rey convencido en que la princesa y heredera del Oeste de Asbru es la ideal para llevar a cabo una tarea como la que han acordado con la eminencia Bishop. – Espero ese tema ya este zanjado, ya que ahora voy a responderles sobre nuestra invitada Lady Lynsah, la cual también debe estar preguntándose muchas cosas sobre su reciente ascenso. – Mira a los presentes mientras deja la copa de vino vacía lentamente sobre la mesa y luego de esos momentos de silencio comienza con las explicaciones. –Lady Lynsah ha estado haciendo un buen trabajo en el ministerio de la moneda, tiene altas capacidades para el cargo y es realmente muy eficiente. Agreguémosle también que cae en agrado de las personas del castillo y su nobleza y lugar de origen le juegan muy a favor. El propio Wort ha recomendado a Lady Lynsah como su sucesora y heredera, por lo que todo aquel que tenga alguna queja sobre su decisión puede ir a discutírsela a el cara a cara siempre y cuando tengan el valor para hacerlo. No creo que mis viejos ojos me engañen, pero no parece disgustarle a Lady Lynsah su trabajo ni su entorno tampoco, pero eso es algo que debe decidir ella. Por ahora es un huésped de honor, pero más adelante si realmente desea convertirse en maestra de la moneda deberá residir aquí en Asbru para ejercer a la perfección sus obligaciones. Lamento informar que no tengo noticias sobre su desaparecido hermano, tal vez usted desee regresar al Puño de Hierro o seguir con su búsqueda, si eso sucede no podrá cumplir con un futuro próximo con los requisitos para tal puesto de importancia en la región, por lo que será mejor que piense con detenimiento si aceptara ese alto cargo que le ofrezco o si decide rechazarlo, la decisión ha de ser solo suya Lady Lynsah-El rey Belt de forma contundente responde a cualquier clase de duda que pudieran tener los allí presentes, ahora solo faltan las respuestas por parte de las jóvenes nobles de Asbru allí presentes.
-Mi santa madre me ha llamado Eddark al nacer, mi compañero es Francis. –Se presentan entre sonrisas aunque esas sonrisas mermaron al escuchar la condición de no muerto de aquel llamado Jack. – No sé si al príncipe le gustara mucho eso…Pero el maestro Noah por su parte no tendrá problemas en permitirte el ingreso al grupo de exploradores o ha algún otro lugar donde puedas ser de utilidad.-La mayoría conoce la triste historia de cómo la esposa del príncipe fue asesinada por vampiros antes de llegar siquiera a Asbru, el rencor de Lans Tartare hacia esa raza es enorme. Desde donde están reunidos esos soldados y el vampiro se pudo escuchar el bello cantar más alejados de ellos, como a unos 30 metros en dirección sur, al parecer los soldados se están divirtiendo de alguna manera ya que hasta música tienen. -Y nosotros aquí sin música ni chicas-Se queda de su suerte uno de los soldados mientras mas allá parecen apaciguarse los ánimos., al menos puede decir el vampiro que el Master ha escuchado sus plegarias, nadie ha intentado matarlo por su condición de no muerto, no al menos aun…
Otros soldados no muy lejos de allí aplauden la interpretación de Mulor y le miran con buenos ojos, el laúd junto a la voz del bardo fue suficiente como para convencer a esos hombres y ponerlos de su lado.
-Adelante muchacho, bienvenido a la ciudad del Oeste, espero que diviertas a la gente y te ganes tus buenas monedas-No lo detuvieron mucho mas y sin retraso le permitieron el paso a la villa cercana a al castillo del Oeste de Asbru. Mientras ese muchacho se adentra en la ciudad otra muchacha llega detrás de él y así también la detienen, incluso presentándose y explicando el que hace allí los soldados no le abrieron el paso, de hecho pareció que más de uno fuera a ensartarla en su arma de asta. Las lanzas se cruzaron una con otra en plena negativa, prácticamente como si no fuera bien recibida allí.
-Si claro, claro…Muéstreme sus papeles de viaje señorita Florian- Con un enojo evidente uno de los soldados exige a la mujer que muestre sus credenciales identificadoras, tanto de nombre como aquella que la habilita como parte del clero del Puño de Hierro.
En la entrada de la ciudad las cosas se pusieron tensas gracias a la monja que llega desde el Puño de Hierro, pero en la iglesia de la ciudad todo es armonía y emoción con el ángel allí presente al cual se le acerca mas y mas gente, haciendo así que el ego del ángel recupere su fuerza y llegue así nuevas fuerzas a su ser celestial. Con esas nuevas fuerzas es más fácil que haga uso de sus poderes y habilidades especiales, mas cuando los allí presentes no se asustan al ver sus ojos blancos, solo se impresionan mucho como cualquier persona común y corriente lo haría en una circunstancia como esa. Lo más sobrenatural que puede hallar el ángel en ese recinto es a la loba que cerca de la entrada de acurruca en sus mantas como si nada pasara, el resto de los allí presentes son personas normales sin ninguna clase de bendición en especial.
En el castillo del Oeste muchos ya se pusieron en marcha como lo han acordado ante el mismísimo rey de la región, aunque aún quedan bastantes asuntos por discutir en la corte del rey, y en esas discusiones tienen plena participación la familia del rey y la joven noble oriunda del Puño de Hierro Lynsah Carstair. La joven en cuestión permanece allí presente y escucha claramente lo que expone el príncipe Lans, también lo que ha dicho respecto a su preciada hija por la cual muestra claros signos de afecto. Ya sacando sus suposiciones y exponiendo los asuntos de importancia y sus preguntas sobre su propia hija y sobre la joven invitada en la región el príncipe guarda silencio para que así su padre y rey con sus propias palabras ponga las cosas en claro.
-Está más que claro que mi nieta es la mejor elección para que permanezca con el obispo Bishop, piénsalo bien hijo, ella es pequeña, ella es casi una nacida aquí en Asbru. Shurelya tiene mucho encanto y es más salvaje que cualquiera de nosotros, sin mencionar que los hombres de armas podemos dar seguridad pero a más de uno no les debe gustar la sangre o las decisiones que tomamos, por eso alguien limpio de esas cargas por completo será más que bienvenido entre el ciudadano común.- Bebe algo de vino el rey convencido en que la princesa y heredera del Oeste de Asbru es la ideal para llevar a cabo una tarea como la que han acordado con la eminencia Bishop. – Espero ese tema ya este zanjado, ya que ahora voy a responderles sobre nuestra invitada Lady Lynsah, la cual también debe estar preguntándose muchas cosas sobre su reciente ascenso. – Mira a los presentes mientras deja la copa de vino vacía lentamente sobre la mesa y luego de esos momentos de silencio comienza con las explicaciones. –Lady Lynsah ha estado haciendo un buen trabajo en el ministerio de la moneda, tiene altas capacidades para el cargo y es realmente muy eficiente. Agreguémosle también que cae en agrado de las personas del castillo y su nobleza y lugar de origen le juegan muy a favor. El propio Wort ha recomendado a Lady Lynsah como su sucesora y heredera, por lo que todo aquel que tenga alguna queja sobre su decisión puede ir a discutírsela a el cara a cara siempre y cuando tengan el valor para hacerlo. No creo que mis viejos ojos me engañen, pero no parece disgustarle a Lady Lynsah su trabajo ni su entorno tampoco, pero eso es algo que debe decidir ella. Por ahora es un huésped de honor, pero más adelante si realmente desea convertirse en maestra de la moneda deberá residir aquí en Asbru para ejercer a la perfección sus obligaciones. Lamento informar que no tengo noticias sobre su desaparecido hermano, tal vez usted desee regresar al Puño de Hierro o seguir con su búsqueda, si eso sucede no podrá cumplir con un futuro próximo con los requisitos para tal puesto de importancia en la región, por lo que será mejor que piense con detenimiento si aceptara ese alto cargo que le ofrezco o si decide rechazarlo, la decisión ha de ser solo suya Lady Lynsah-El rey Belt de forma contundente responde a cualquier clase de duda que pudieran tener los allí presentes, ahora solo faltan las respuestas por parte de las jóvenes nobles de Asbru allí presentes.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
La gente parecio emocionada, mientras yo buscaba algun angel o demonio. Pero nada. Ni unos ni otros. aun asi habia la presencia de otro ser diferente. Cuando lo vi sonrei. Era l achica que habia visto hace poco. La que parecia la mas pura de todos los humanos. aunque, cierto era que no era nada conocido para mi. Era una raza extraña, como medio animal. Uno se esos perros.
Por lo que cuando volvi a la normalidad, con mas orgullo que antes me sente a su lado y le puse la mano en la frente.
-yo te bendigo niña.
dje imitando a los humanos. En cierto modo para sentarme al lado de alguien quizas mas normal, y tambien para disimular. Una vez sentada me apoye con las alas en la pared. Luego la hable en bajo.
-Espero que tu seas una persona mas normal...no quiero que me odien, pero tampoco que me agobien sin dejarme respirar.
La dije a ella mientras cerraba los ojos algo cansada de haber usado mi poder.
-
Por lo que cuando volvi a la normalidad, con mas orgullo que antes me sente a su lado y le puse la mano en la frente.
-yo te bendigo niña.
dje imitando a los humanos. En cierto modo para sentarme al lado de alguien quizas mas normal, y tambien para disimular. Una vez sentada me apoye con las alas en la pared. Luego la hable en bajo.
-Espero que tu seas una persona mas normal...no quiero que me odien, pero tampoco que me agobien sin dejarme respirar.
La dije a ella mientras cerraba los ojos algo cansada de haber usado mi poder.
-
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
A simple vista no pude observar nada extraño en los humanos, de hecho, ninguno me estaba vigilando a pesar de la presencia del ángel. Por lo que ninguno había percibido algo extraño por mí parte. Eso estaba bien, cuanto menos llamara la atención menos probabilidades de que me descubrieran.
Terminé la cálida bebida, y me acurruqué aún más en la manta, observando qué es lo que hacía la rubia. Se había desplazado por primera vez desde que se había ido el sacerdote dejándola a cargo de todos los que nos hallábamos en el interior del edificio.
Sentí una suave presión en el ambiente cuando a la chica le cambiaron el color de los ojos. Podía sentirlo, puesto que era bastante sensible a las energías que había en el mundo, entre ellas fantasmas y otras criaturas sobrenaturales. Por lo que, para mí era bastante real que la mujer estaba haciendo algo. Y como desconocía qué era, traté de hacerme lo más pequeña que pude, tratando de evitar lo que fuese. Pero a pesar de mis esfuerzos sus prístinos ojos se clavaron en mi figura.
Avanzó hacia mí, poniéndome muy nerviosa. ¿Sabría que no era humana y me iba a sacar del lugar? O peor, ¿me mataría? Fuese lo que fuese, iba a provocar que todos los humanos me prestasen atención y eso era algo que no quería. Busqué algún lugar por el que huir, a pesar de saber que no había otra salida que no fuese la puerta. Así que, cuando le quedaban menos de tres pasos llegar hasta mí, decidí aparentar toda la calma y tranquilidad que pudiera. Quizás así no llamaría tanto la atención.
Pero no iba a tener tanta suerte. Sobre todo, tras haberme "bendecido". No estaba segura de que lo hubiera hecho, a fin de cuentas, yo no me regía por los mismos dioses que ella, y quizás por eso no pudiera sentirlo. O puede que en realidad no hubiera hecho algo. Todo eso entraba dentro de las posibilidades. No pude evitar mirarla mal, a fin de cuentas, ahora seguro que me estaba mirando la mitad de la Iglesia. Pero saber que estaba siendo observada, me hizo cambiar la expresión en pocos segundos.
- No sé si soy normal, aunque seguramente sea un poco menos extraña que tú. Pero tus actos, a pesar de ser inocentes, me pueden meter en un lío. Mi raza suele ser cazada por los humanos.- respondí en el mismo tono de voz baja del ángel, haciendo un poco de teatro para que pareciera que le estaba dando las gracias o algo así. Aunque en realidad estaba algo molesta por sus buenas intenciones.
Terminé la cálida bebida, y me acurruqué aún más en la manta, observando qué es lo que hacía la rubia. Se había desplazado por primera vez desde que se había ido el sacerdote dejándola a cargo de todos los que nos hallábamos en el interior del edificio.
Sentí una suave presión en el ambiente cuando a la chica le cambiaron el color de los ojos. Podía sentirlo, puesto que era bastante sensible a las energías que había en el mundo, entre ellas fantasmas y otras criaturas sobrenaturales. Por lo que, para mí era bastante real que la mujer estaba haciendo algo. Y como desconocía qué era, traté de hacerme lo más pequeña que pude, tratando de evitar lo que fuese. Pero a pesar de mis esfuerzos sus prístinos ojos se clavaron en mi figura.
Avanzó hacia mí, poniéndome muy nerviosa. ¿Sabría que no era humana y me iba a sacar del lugar? O peor, ¿me mataría? Fuese lo que fuese, iba a provocar que todos los humanos me prestasen atención y eso era algo que no quería. Busqué algún lugar por el que huir, a pesar de saber que no había otra salida que no fuese la puerta. Así que, cuando le quedaban menos de tres pasos llegar hasta mí, decidí aparentar toda la calma y tranquilidad que pudiera. Quizás así no llamaría tanto la atención.
Pero no iba a tener tanta suerte. Sobre todo, tras haberme "bendecido". No estaba segura de que lo hubiera hecho, a fin de cuentas, yo no me regía por los mismos dioses que ella, y quizás por eso no pudiera sentirlo. O puede que en realidad no hubiera hecho algo. Todo eso entraba dentro de las posibilidades. No pude evitar mirarla mal, a fin de cuentas, ahora seguro que me estaba mirando la mitad de la Iglesia. Pero saber que estaba siendo observada, me hizo cambiar la expresión en pocos segundos.
- No sé si soy normal, aunque seguramente sea un poco menos extraña que tú. Pero tus actos, a pesar de ser inocentes, me pueden meter en un lío. Mi raza suele ser cazada por los humanos.- respondí en el mismo tono de voz baja del ángel, haciendo un poco de teatro para que pareciera que le estaba dando las gracias o algo así. Aunque en realidad estaba algo molesta por sus buenas intenciones.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
"gracias por la información señores, bueno ahora tengo que seguir mi camino"
les dije a aquellos hombres que sin duda esperaba volver a ver para agradecerles toda la ayuda que me dieron aquellos hombres.
gracias master me as ayudado mucho que sepas que te debo una señor.
dicho esto continúe mi camino en dirección al castillo no sin antes pasar por donde escuche aquella hermosa canción en la cual vi a aquel hombre alto...
como decirlo hacia gracia a la vista sin duda, sabia nada mas verlo a que se dedicaba seguramente era un bufón o un juglar me acerque a el y le dije.
"buenas noches, mui bonita tu canción lastima que no la alla entendido, me gustaría que me cantases una bueno pero ahora me gustaría seguir mi camino en compañía de alguien, se que mi propuesta es algo precipitada pero dudo que a ti tampoco te ara mucha gracia el ir solo y menos en estos tiempos que corren
les dije a aquellos hombres que sin duda esperaba volver a ver para agradecerles toda la ayuda que me dieron aquellos hombres.
gracias master me as ayudado mucho que sepas que te debo una señor.
dicho esto continúe mi camino en dirección al castillo no sin antes pasar por donde escuche aquella hermosa canción en la cual vi a aquel hombre alto...
como decirlo hacia gracia a la vista sin duda, sabia nada mas verlo a que se dedicaba seguramente era un bufón o un juglar me acerque a el y le dije.
"buenas noches, mui bonita tu canción lastima que no la alla entendido, me gustaría que me cantases una bueno pero ahora me gustaría seguir mi camino en compañía de alguien, se que mi propuesta es algo precipitada pero dudo que a ti tampoco te ara mucha gracia el ir solo y menos en estos tiempos que corren
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Era bastante predecible que los guardias lo dejarían pasar, una canción que les alegre la espera es mas que aceptable como entrada a la ciudad. Lo que no era predecible fue lo que sucedió luego. Luego de unos metros de camiar, un hombre muy bien vestido, con aspecto importante y un alto sombrero en la cabeza, se acercó a mi, iniciando una charla sobre la canción que acababa de tocar, y que le gustaría que siguiéramos camino juntos. No entendí muy bien esta ultima petición, en el sentido de que ya estamos en la ciudad. Su argumento fue la supuesta inseguridad, pero el hecho de ya entrar por las murallas nos proporciona resguardo de esos problemas. No obstante, no deseaba ser mal educado, mas aun luego de que alabara mi canción (y expresara su deseo de escuchar una, lo cual siempre viene bien, monetariamente hablando), así que le dije: -"Pues bien, mi buen señor, déjeme presentarme en principio: Mi nombre es Mulor, el Magnifico, y actualmente me dirijo a la posada mas cercana en busca de cama, comida y trabajo probablemente. No tengo problema si desea acompañarme hasta allí, no obstante no pienso tampoco desviarme mucho de mi camino"-
Mirándolo a la cara, esperé mi respuesta.
Mirándolo a la cara, esperé mi respuesta.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Es increíble lo rápido que se puso tensa la situación, al Florian podría haber entrado a la ciudad para que la gente quisiera ensartarla en una hoja, pero igual solo le costo dos oraciones. La cuestión es que los soldados que reguardaban la entrada no la dejaron entrar así por así, por mas que ella les pusiera mala cara, vaya que es bueno ver gente que haga bien su trabajo, pero por su parte Florian se comenzaba a molestar mas y mas. Solo con la actitud de los soldados ya quería ella sacar sus hojas y amenazarlos, sin embargo pelear contra dos guardias seria una verdadera metida de pata y la hermana no tenia espacio para hacer tales cosas. "No hagas idioteces Florian" fueron las palabras del sumo sacerdote que comenzaron a rebotar en su cabeza en ese mismo instante, mientras ella adopto otra estrategia para conseguir pase dentro de la ciudad.
-oh! mis papeles, pero pues claro- Tal y como si un par de manos invisibles le estuvieran jalando la cara, Florian intento desde lo profundo de su alma simular una sonrisa. La verdad es que ella no podía permitirse un conflicto tan trivial como ese, así que en cambio intento, énfasis en "intento", llevarse bien con los soldados. -vale, lo siento, aquí tienen- dijo con mal fingida calma mientras les pasaba el papel que le habían dado allá en el Puño de Hierro, aquel que le confería su misión de búsqueda. También metió la mano en su bolsillo trasero, sacando se de ahí un ostentoso crucifijo de fina plata, brillante como un sol en miniatura en medio de la noche. -ven esto? saben lo que es? no? pues es la autoridad que tengo para cumplir con las misiones que la santa iglesia me relega...necesito buscar a cierta persona de importancia en el Puño de Hierro, y se muy bien que esta aquí en Asbru, es esa la voluntad del Master y todo aquel que se oponga a ello es un hereje- Sostuvo ella por un momento el crucifijo y lo volvió a meter en su bolsillo. -Ahora si puedo pasar?-
-oh! mis papeles, pero pues claro- Tal y como si un par de manos invisibles le estuvieran jalando la cara, Florian intento desde lo profundo de su alma simular una sonrisa. La verdad es que ella no podía permitirse un conflicto tan trivial como ese, así que en cambio intento, énfasis en "intento", llevarse bien con los soldados. -vale, lo siento, aquí tienen- dijo con mal fingida calma mientras les pasaba el papel que le habían dado allá en el Puño de Hierro, aquel que le confería su misión de búsqueda. También metió la mano en su bolsillo trasero, sacando se de ahí un ostentoso crucifijo de fina plata, brillante como un sol en miniatura en medio de la noche. -ven esto? saben lo que es? no? pues es la autoridad que tengo para cumplir con las misiones que la santa iglesia me relega...necesito buscar a cierta persona de importancia en el Puño de Hierro, y se muy bien que esta aquí en Asbru, es esa la voluntad del Master y todo aquel que se oponga a ello es un hereje- Sostuvo ella por un momento el crucifijo y lo volvió a meter en su bolsillo. -Ahora si puedo pasar?-
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Por petición, después de que hablaran diferentes "grandes" del reino, todos fueron desalojando la sala, quedándose ella con su padre, su abuelo y Lyn. Al principio, no sabía a qué venía esto, pero cuando su padre le dijo a Lyn que se sentara porque Belt iba a hablar, entonces se imaginó más o menos las cosas, al menos referentes a Lyn. Shurelya cerró los ojos y sonrió sincera cuando su padre le puso la mano en el pelo, porque simplemente la gustaba mucho que hiciera eso y más cosas, claro, como el abrazo después de finalizar todas sus palabras. Aunque ella tenía ahora otras cosas en las que pensar que en el abrazo. Ella era quien tenía que decidir aceptar aquella tarea o rechazarla. Claro que a ella no le gustaría separarse de su padre, pero su reino lo necesita, tiene que empezar ya a poder cuidarlo y qué mejor que empezar con Bishop, en la tarea que este la encomiende. Shurelya se acercó a las mejillas de su padre para darle un gran beso y una dulce caricia, para luego mirarle a los ojos fijamente y con seriedad.
-Tranquilo papá, yo voy a cumplir con Bishop y te haré sentir muy orgulloso de mi. Seré victoriosa en la tarea.
Se mostraba seria y decidida. Ella siempre había sido educada para ser responsable y aunque a veces tuviera algún desliz o la vaguería pudiera con ella de forma puntual, siempre trataba de estar a la altura, porque sabe que puede y es lo que desea plenamente. Mira la niña a su abuelo con orgullo y fuerza de voluntad. Sea cual sea la tarea que Bishop tenga para ella, será cumplida sin rechistar y a la perfección, eso, es lo que lleva en la cabeza la niña. Nada de "Lo intentaré", no, tan solo un "Lo haré" muy decidido. Ellos mismos lo habían dicho, ella era la única de la familia que podía hacerlo, la más pequeña y a la que nadie guardaría rencor ni por asomo. Desde luego, la decisión afirmativa de la niña no significaba que le resultara fácil separarse de su padre, pero en estos momentos, no era por una persona, sino por todos los habitantes de Asbru Oeste. En un futuro dependerían de ella.
-Puede que sea duro, pero no lo suficiente para mi. El reino me necesita... O lo hará en un futuro, así que debo estar preparada.
-Tranquilo papá, yo voy a cumplir con Bishop y te haré sentir muy orgulloso de mi. Seré victoriosa en la tarea.
Se mostraba seria y decidida. Ella siempre había sido educada para ser responsable y aunque a veces tuviera algún desliz o la vaguería pudiera con ella de forma puntual, siempre trataba de estar a la altura, porque sabe que puede y es lo que desea plenamente. Mira la niña a su abuelo con orgullo y fuerza de voluntad. Sea cual sea la tarea que Bishop tenga para ella, será cumplida sin rechistar y a la perfección, eso, es lo que lleva en la cabeza la niña. Nada de "Lo intentaré", no, tan solo un "Lo haré" muy decidido. Ellos mismos lo habían dicho, ella era la única de la familia que podía hacerlo, la más pequeña y a la que nadie guardaría rencor ni por asomo. Desde luego, la decisión afirmativa de la niña no significaba que le resultara fácil separarse de su padre, pero en estos momentos, no era por una persona, sino por todos los habitantes de Asbru Oeste. En un futuro dependerían de ella.
-Puede que sea duro, pero no lo suficiente para mi. El reino me necesita... O lo hará en un futuro, así que debo estar preparada.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
"bueno pues vallamos a la posada"
le dije a aquel pintoresco hombre.
me parecía un tipo en el cual poder confiar.
pero ya tenia mi edad y en todos estos años me parece que e aprendido la lección de no fiarme ni de mi propia sombra.
"yo también necesitaría ir a una posada mas que nada para dormir puesto que hambre no tengo además llevo toda la noche caminando y estoy reventado"
le dije a aquel bardo.
"bueno será mejor que empecemos a caminar."
le dije a aquel pintoresco hombre.
me parecía un tipo en el cual poder confiar.
pero ya tenia mi edad y en todos estos años me parece que e aprendido la lección de no fiarme ni de mi propia sombra.
"yo también necesitaría ir a una posada mas que nada para dormir puesto que hambre no tengo además llevo toda la noche caminando y estoy reventado"
le dije a aquel bardo.
"bueno será mejor que empecemos a caminar."
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
-"Perfecto, vayamos entonces"- Le dije. -"Por cierto: ¿Cuál es su nombre? Y otra cosa, supongo que, como yo, usted no tiene idea de donde queda la posada, por ende me parece lo mas inteligente ahora mismo preguntarle a alguien si nos puede indicar el lugar..."- Dicho esto, comencé a caminar.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
"mi nombre es Jack, Jack el largo"
dije siguiéndole.
tenia muchas cosas en la cabeza como para preocuparme demasiado por decirle mi raza no sabia que hacer en ese momento asi que le deje a el que hablara con para preguntarle donde estaba la posada.
dije siguiéndole.
tenia muchas cosas en la cabeza como para preocuparme demasiado por decirle mi raza no sabia que hacer en ese momento asi que le deje a el que hablara con para preguntarle donde estaba la posada.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
La sala que hace unos instantes estaba a rebosar, ahora está casi vacía salvo por unas pocas personas. La joven Lynsah se sentó en una silla como se le había indicado hace unos instantes, por lo que supuso que se trataba de algo importante. Su mirada se paseaba por todo los allí presentes, desde el rey del Oeste hasta su hijo y su pequeña nieta, la cual también debería tomar una decisión significativa en su vida. La ojiverde, nerviosa –por no saber concretamente de qué se trataba- empezó a jugar con su pelo y colocar algunos mechones tras la oreja.
Al escuchar las palabras del rey del oeste, la joven se quedó sin palabras, sin saber qué decir, ya que sabía que su ayuda era de utilidad, pero no se podía imaginar que la nombrara heredera y sucesora en el cargo, ya que era un papel bastante importante y no sabía si sería capaz de hacerlo. Estaba contenta con su trabajo, pues le hacía sentir útil y que ayudaba a los demás, y añadiendo que ya de por sí le gustaba. Sabía que no era una decisión que se pudiera tomar a la ligera, ya que dependiendo de su respuesta pasarían cosas muy distintas, y, aunque no podría volver con su familia -cosa que es demasiado peligrosa-, necesitaba aceptar.
-Bueno, sé que es algo sobre lo que debería reflexionar tranquilamente, tomarmelo con calma- Empezó a hablar en un tono bajo- Pero necesito aceptar, me gusta este trabajo y ser de utilidad.
Al escuchar las palabras del rey del oeste, la joven se quedó sin palabras, sin saber qué decir, ya que sabía que su ayuda era de utilidad, pero no se podía imaginar que la nombrara heredera y sucesora en el cargo, ya que era un papel bastante importante y no sabía si sería capaz de hacerlo. Estaba contenta con su trabajo, pues le hacía sentir útil y que ayudaba a los demás, y añadiendo que ya de por sí le gustaba. Sabía que no era una decisión que se pudiera tomar a la ligera, ya que dependiendo de su respuesta pasarían cosas muy distintas, y, aunque no podría volver con su familia -cosa que es demasiado peligrosa-, necesitaba aceptar.
-Bueno, sé que es algo sobre lo que debería reflexionar tranquilamente, tomarmelo con calma- Empezó a hablar en un tono bajo- Pero necesito aceptar, me gusta este trabajo y ser de utilidad.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Dentro de la seguridad de la villa cercana al castillo del Oeste dos almas se encuentran, dos almas de diferentes lugares y razas, posiblemente también posean objetivos diferentes, pero aun asi allí están tan extranjeros en ese lugar el uno como el otro. Ambos hombres han demostrado ser inocentes de cualquier impedimento para ingresar a la ciudad asi que ahora gozan de total libertad de movimiento en esa noche fría pero soportable gracias a que el verano esta golpeando la puerta y pidiendo paso rápidamente. Mientras charlan y andan por caminos cubiertos de nieve los rodean algunas casas bajas, mas lejos pequeños establos y unos cientos de metros mas adelante la plaza de la ciudad la cual esta rodeada de varias calles y edificios de mayor importancia para la gente del oeste de Asbru, como lo son la mejor taberna y la iglesia.
Mas atrás de esos dos hombres queda la religiosa oriunda de Torquemada enviada del Puño de Hierro en una importante misión, allí esta junto a los soldados en una situación un tanto tensa. La joven monja no es de las personas que usan mucho la etiqueta y los soldados con su enojo no mejoran la situación en nada, aun asi la joven mujer haciendo uso de la inteligencia y el sentido común sobrelleva lo mejor que puede la situación y cumple con las exigencias allí presentadas por los soldados del Oeste. Con su "encantadora sonrisa" y su "gran calma" otorgo los papeles de viaje para que los examinaran los soldados y luego de ello con unas disculpas mostró su crucifico de fina plata, demostrando asi su verdadera identidad abalada por el Puño de Hierro y la santa iglesia que la protege y resguarda.
-Sus identificaciones son autenticas, puede ingresar señorita Florian, pero por su seguridad le advierto que se abstenga de usar la palabra "hereje" con tanta facilidad.- Le devuelven sus pertenencias tras la advertencia y le abren paso para que ingrese ella también a la ciudad en calidad de invitada y sin manchas en su haber, no al menos de momento.
La calma que reina en la iglesia por momentos es mucha y por momentos parece quebrarse, ya que en algunas circunstancias los fieles creen que el ángel hace algo significativo y empieza la euforia, como cuando bendijo a esa recién llegada joven y bastante bonita haciendo que muchos se acercaran a agradecer al ángel por su bondad, otros se acercaron a la joven loba a pedirle consejo, algo útil que los hiciera dignos a ellos también de tal sagrada bendición.
En el castillo del Oeste reina la sorpresa, aunque pocas personas son testigos de lo mismo, la familia del rey y la joven dama Lynsah son los únicos allí presentes para sorprenderse. El príncipe de Asbru y la joven noble parecen ser los mas sorprendidos por las palabras del rey Belt quien parece estar muy satisfecho con la respuesta de ambas señoritas de alta arcunia.
-Estoy complacido de escuchar a mi nieta hablar con tanta madurez y valor, no se puede esperar mas que buenos resultados de quien porta mi sangre y heredad. De igual modo agradezco la toma de su decision Lady Lynsah, este momento es crucial en la historia de mi familia y de toda Asbru. Decir que pueden morir es algo tal vez extremo, no imposible, pero si algo extremo. Si llegara lo peor su nobleza les puede salvar la vida, ademas, haré arreglos para que si sucede lo peor puedan escapar sanas y salvas. Ahora lo mejor es descansar, mi hijo tiene mucho para hacer y yo también. Sumemos que Lady Lynsah ha de trabajar y la princesa comenzara sus labores en la iglesia del Oeste estaremos todos ocupados y es vital estar descansado para cumplir dichas empresas con efectividad. -El rey se pone de pie y su hijo lo imita.- Id con le bendición del rey allí donde quiera que os encontréis, rezad y servid con valor y dignidad mis buenos vasallos, mi amada familia-Tras dar su don a los allí presentes besa a su nieta en ambas mejillas y luego se acerca a Lynsah para besar sus manos, un honor que pocos en su vida han logrado obtener de un rey.
La luna sigue en movimiento asi como los vientos y el tiempo en Asbru, pasando ya por mas de la mitad de la oscura y fresca madrugada.
Mas atrás de esos dos hombres queda la religiosa oriunda de Torquemada enviada del Puño de Hierro en una importante misión, allí esta junto a los soldados en una situación un tanto tensa. La joven monja no es de las personas que usan mucho la etiqueta y los soldados con su enojo no mejoran la situación en nada, aun asi la joven mujer haciendo uso de la inteligencia y el sentido común sobrelleva lo mejor que puede la situación y cumple con las exigencias allí presentadas por los soldados del Oeste. Con su "encantadora sonrisa" y su "gran calma" otorgo los papeles de viaje para que los examinaran los soldados y luego de ello con unas disculpas mostró su crucifico de fina plata, demostrando asi su verdadera identidad abalada por el Puño de Hierro y la santa iglesia que la protege y resguarda.
-Sus identificaciones son autenticas, puede ingresar señorita Florian, pero por su seguridad le advierto que se abstenga de usar la palabra "hereje" con tanta facilidad.- Le devuelven sus pertenencias tras la advertencia y le abren paso para que ingrese ella también a la ciudad en calidad de invitada y sin manchas en su haber, no al menos de momento.
La calma que reina en la iglesia por momentos es mucha y por momentos parece quebrarse, ya que en algunas circunstancias los fieles creen que el ángel hace algo significativo y empieza la euforia, como cuando bendijo a esa recién llegada joven y bastante bonita haciendo que muchos se acercaran a agradecer al ángel por su bondad, otros se acercaron a la joven loba a pedirle consejo, algo útil que los hiciera dignos a ellos también de tal sagrada bendición.
En el castillo del Oeste reina la sorpresa, aunque pocas personas son testigos de lo mismo, la familia del rey y la joven dama Lynsah son los únicos allí presentes para sorprenderse. El príncipe de Asbru y la joven noble parecen ser los mas sorprendidos por las palabras del rey Belt quien parece estar muy satisfecho con la respuesta de ambas señoritas de alta arcunia.
-Estoy complacido de escuchar a mi nieta hablar con tanta madurez y valor, no se puede esperar mas que buenos resultados de quien porta mi sangre y heredad. De igual modo agradezco la toma de su decision Lady Lynsah, este momento es crucial en la historia de mi familia y de toda Asbru. Decir que pueden morir es algo tal vez extremo, no imposible, pero si algo extremo. Si llegara lo peor su nobleza les puede salvar la vida, ademas, haré arreglos para que si sucede lo peor puedan escapar sanas y salvas. Ahora lo mejor es descansar, mi hijo tiene mucho para hacer y yo también. Sumemos que Lady Lynsah ha de trabajar y la princesa comenzara sus labores en la iglesia del Oeste estaremos todos ocupados y es vital estar descansado para cumplir dichas empresas con efectividad. -El rey se pone de pie y su hijo lo imita.- Id con le bendición del rey allí donde quiera que os encontréis, rezad y servid con valor y dignidad mis buenos vasallos, mi amada familia-Tras dar su don a los allí presentes besa a su nieta en ambas mejillas y luego se acerca a Lynsah para besar sus manos, un honor que pocos en su vida han logrado obtener de un rey.
La luna sigue en movimiento asi como los vientos y el tiempo en Asbru, pasando ya por mas de la mitad de la oscura y fresca madrugada.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Una vez recorrido un buen trecho de camino, veo adelante nuestro lo que aparenta ser una iglesia. La misma se encuentra sobre una calle que da a una plaza central, donde se ubican otros edificios. Una vez llegados a la plaza me acerco a un hombre y le digo: -"Disculpe señor. ¿Seria tan amable de indicarnos donde se ubica la posada mas cercana? Necesitamos un lugar donde pasar la noche y, yo por lo menos, llenar mi estomago"-
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Las Tierras del Norte no son lugar para los dèbiles, sino para los de nuestro tipo, gente fuerte y recia que no le teme a nada, gente acostumbrada a las grandes heladas que invaden estas tierras, como flechas provenientes del cielo en una verdadera batalla sangrienta. Las personas que no pueden adaptarse a estas condiciones, mueren de maneras atroces, suele ser a causa de enfermedades mortales, y aun asì, los que llegan a sobrevivirlas, deben tener el suficiente cerebro y valor para enfrentarse a lo que hay ahì afuera...
Hace no màs de 2 horas volvì de la ùltima cacerìa, la cual no tuvo èxito. El alimento està escaseando y si esto continua, la gente tendrà el mismo destino que la comida.
Parece que todos los carteles apuntan a una ùnica salida, una que no quiero tomar, la puta madre... Mierda! Dios no es misericordioso con los hijos del frìo. Tendrè que abandonar estas tierras, viajar màs allà de las putas fronteras y pedir ayuda como un puto marica... Yo, el gran Deyb Konnan! Y claro, eligen al bàrbaro de metro 80 para este tipo de cosas, porque nadie està a la altura...
Jamàs pensè que llegarìamos a esto, sin embargo era bastante predecible si lo pienso bien. El clima es demasiado hostil y tarde o temprano esto nos iba a pasar.
Podrìa salir mañana a la mañana, tal vez pedir ayuda en el oeste. No, me odiarìan allà. Aunque... deberìa probar suerte, despues de todo ahì deben tener alimento, mucho alimento! Y de esa manera mi padre estarìa muy orgulloso de mì, si.
A la mañana siguiente me levantè, estaba muy caliente por ende aprovechè para mojar mi polla una vez màs antes de salir. La muchacha dormìa, pero a la tercera embestida la muy puta sintiò la bestia dentro suyo. Cuando terminè me dispuse a armar mi equipaje: lo justo y necesario para un viaje de mediana distancia, ida y vuelta. Busquè al semental en mejor estado, lo acariciè cerca del estomago y lo montè.
Partì asì hacia las tierras del oeste, junto a un reducido grupo conformado por guerreros formidables.
Luego de una larga cabalgata, pude divisar a lo lejos las fronteras, seguidas por un montòn de extensas tierras que mis ojos jamàs habìan visto, o al menos no con la madurez con la que observan ahora. A medida que avanzabamos, podìamos distinguir siluetas que, con el paso del tiempo, se iban haciendo màs y màs claras. Eran soldados, y se interponìan entre el cruce que une a ambas tierras, las del norte y las del oeste.
Hace no màs de 2 horas volvì de la ùltima cacerìa, la cual no tuvo èxito. El alimento està escaseando y si esto continua, la gente tendrà el mismo destino que la comida.
Parece que todos los carteles apuntan a una ùnica salida, una que no quiero tomar, la puta madre... Mierda! Dios no es misericordioso con los hijos del frìo. Tendrè que abandonar estas tierras, viajar màs allà de las putas fronteras y pedir ayuda como un puto marica... Yo, el gran Deyb Konnan! Y claro, eligen al bàrbaro de metro 80 para este tipo de cosas, porque nadie està a la altura...
Jamàs pensè que llegarìamos a esto, sin embargo era bastante predecible si lo pienso bien. El clima es demasiado hostil y tarde o temprano esto nos iba a pasar.
Podrìa salir mañana a la mañana, tal vez pedir ayuda en el oeste. No, me odiarìan allà. Aunque... deberìa probar suerte, despues de todo ahì deben tener alimento, mucho alimento! Y de esa manera mi padre estarìa muy orgulloso de mì, si.
A la mañana siguiente me levantè, estaba muy caliente por ende aprovechè para mojar mi polla una vez màs antes de salir. La muchacha dormìa, pero a la tercera embestida la muy puta sintiò la bestia dentro suyo. Cuando terminè me dispuse a armar mi equipaje: lo justo y necesario para un viaje de mediana distancia, ida y vuelta. Busquè al semental en mejor estado, lo acariciè cerca del estomago y lo montè.
Partì asì hacia las tierras del oeste, junto a un reducido grupo conformado por guerreros formidables.
Luego de una larga cabalgata, pude divisar a lo lejos las fronteras, seguidas por un montòn de extensas tierras que mis ojos jamàs habìan visto, o al menos no con la madurez con la que observan ahora. A medida que avanzabamos, podìamos distinguir siluetas que, con el paso del tiempo, se iban haciendo màs y màs claras. Eran soldados, y se interponìan entre el cruce que une a ambas tierras, las del norte y las del oeste.
Última edición por Deyb Konnan el Vie Nov 01, 2013 12:36 am, editado 1 vez
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Mire a la chica algo intrigada aun sn baer muy bien que era. Pero ya le preguntaria cuando las cosas fueran mejor para todos. Mire al techo y luego a todas aquellas personas. Estaba empezando a mosquearme ya que parecian estar inquietas para ver si hacia algo mas. Como si fuera un simple fenomeno extraño. Suspire y baje la cabeza mirando a esas personas. Podia probar y podria funcionar.
-Disculpen, pero...¿podrian dejarnos un poco de privacidad? Necesito concentracion y relajacion. Simplemente pido eso.
Dije a la gente y despues mire a la loba esperando que aquello funcionara.
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Dije a la gente y despues mire a la loba esperando que aquello funcionara.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
La futura princesa de Asbru porta con carisma su decisión, sonriendo ampliamente y dejando la seriedad a un lado, cuando su abuelo y su padre, se alegraron de su decisión. Se explica que las probabilidades de muerte son bastante escasas, pero lo escaso no quita que sea posible, por lo que deberían andarse con cuidado. La niña no se amedrenta con la palabra muerte, pues sabe que será protegida y además, no puede tenerle miedo a una causa "natural", si ha de morir sin poderse evitar, no será ella quién lloriqueé, en el último segundo de su vida. Pero sabe que no pasará, hasta dentro de un tiempo. Nada garantiza que vaya a vivir muchos años más, pero tampoco que no vaya a hacerlo, pero no hay que pensar en esto, sino en la ocupación que tendrá ella en la iglesia con Bishop. Se da la "idea" de ir a dormir, plan magnífico puesto que el sueño no se hace esperar, menos para una chiquilla, que aún no tiene descompensación de "horario" y ni la tendrá una vez empiece sus labores, puesto que también acabará cansada y querrá dormir cuando sea su tiempo de descanso, el cual no será malgastado.
-Sí, a dormir, así mañana la energía estará a tope para empezar con buen pie.
Dice Shurelya dejándose besar por su abuelo, devolviéndole la misma acción junto a un abrazo fuerte. Luego besa a su padre y también le abraza, pero durante unos segundos más que con su abuelo, puesto que él fue con Lynsah. Se siente dichosa la futura princesa de que los presentes estén satisfechos con sus signos de madurez, pero aún más dichosa estando con su familia, queriéndoles y siento querida por ellos, obviamente. Es posible que poco tiempo le quede para poder seguir divirtiéndose con su padre de vez en cuando, pues ira creciendo poco a poco y adquiriendo tareas más difíciles y que le consuman más tiempo, otras preocupaciones y prioridades, por lo que no será tratada como la niña que es actualmente, ni ella podrá ser tan... "Cariñosa" como ahora. Eso piensa ella, cosa que no la gusta, ya que, siempre hay que dedicarle cierto afecto a la familia, pero ya se verá lo que ocurre más adelante. Siente un deseo extraño de dormir esa noche con su padre, pero prefiere guardárselo para sus adentros, ya que no quisiera recibir una negativa.
-Buenas noches a todos. Que el día que se aproxima os traiga fuerza y vitalidad para afrontar la dura jornada.
-Sí, a dormir, así mañana la energía estará a tope para empezar con buen pie.
Dice Shurelya dejándose besar por su abuelo, devolviéndole la misma acción junto a un abrazo fuerte. Luego besa a su padre y también le abraza, pero durante unos segundos más que con su abuelo, puesto que él fue con Lynsah. Se siente dichosa la futura princesa de que los presentes estén satisfechos con sus signos de madurez, pero aún más dichosa estando con su familia, queriéndoles y siento querida por ellos, obviamente. Es posible que poco tiempo le quede para poder seguir divirtiéndose con su padre de vez en cuando, pues ira creciendo poco a poco y adquiriendo tareas más difíciles y que le consuman más tiempo, otras preocupaciones y prioridades, por lo que no será tratada como la niña que es actualmente, ni ella podrá ser tan... "Cariñosa" como ahora. Eso piensa ella, cosa que no la gusta, ya que, siempre hay que dedicarle cierto afecto a la familia, pero ya se verá lo que ocurre más adelante. Siente un deseo extraño de dormir esa noche con su padre, pero prefiere guardárselo para sus adentros, ya que no quisiera recibir una negativa.
-Buenas noches a todos. Que el día que se aproxima os traiga fuerza y vitalidad para afrontar la dura jornada.
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Los momentos difícil traen consigo respuestas inesperadas, hechos que uno no puede proveer ni calcular, incluso siendo una persona inteligente y con experiencias varias las acciones y consecuencias sobre el mundo jamas podrán ser abarcadas en su totalidad. Lans Tartare ahora es sorprendido por su propia hija cuando antes fue sorprendido por su padre, su propia sangre pareciera tomar decisiones que lo afectan directamente prácticamente sin consultarle lo cual es bastante delicado cuando estas decisiones le tocan el corazón de lleno. Las batallas no prepararon a Lans Tartare a como afrontar el traspaso de su amada hija de niña a señorita, eso es algo que le llega de lleno mas rápido de lo que se podía esperar, pero allí esta afrontando con la frente en alto los problemas actuales del reino sin escaparse a nada. Se abraza con su niña amada y única hija mientras se encuentran en un abrazo afectivo cargado de sentimiento, lo extiende el padre mucho tiempo apenas entregando a su hija al rey para que el también expresara su amor hacia ella.
-Lo se, tengo fe en ti asi como en Lady Lynsah, es solo que...No se, no se como explicarlo Shurelya..- Trata de darse a entender Lans pero es algo difícil de explicar los sentimientos del corazón de un padre. Presento luego sus respetos a la que en algún futuro próximo se convertirá de seguro en la nueva maestra de la moneda del Oeste de Asbru. Palmea levemente los hombros de Lynsah y luego al igual que su padre le besa las manos mostrando una leve sonrisa en su rostro.
-Mis felicidades por el logro obtenido Lady Lynsah, espero que nuestra unión traiga satisfacción a ambas partes.- Con aprecio y sinceridad el príncipe del Oeste de Asbru saluda a la que posiblemente sea su propia maestra de la moneda, después de todo cuando muera el maestro Wort ella sera la maestra, y al morir Beld el sera el nuevo rey.
-Sera mejor que hagamos caso a las palabras de mi padre, descansemos que tenemos mucho para hacer en días venideros..- Se saluda con su padre y con Lynsah antes de con su hija dirigirse a la habitación de la pequeña, necesita trabar unas palabras con amada Shurelya antes de ir finalmente a descansar.
-Lo se, tengo fe en ti asi como en Lady Lynsah, es solo que...No se, no se como explicarlo Shurelya..- Trata de darse a entender Lans pero es algo difícil de explicar los sentimientos del corazón de un padre. Presento luego sus respetos a la que en algún futuro próximo se convertirá de seguro en la nueva maestra de la moneda del Oeste de Asbru. Palmea levemente los hombros de Lynsah y luego al igual que su padre le besa las manos mostrando una leve sonrisa en su rostro.
-Mis felicidades por el logro obtenido Lady Lynsah, espero que nuestra unión traiga satisfacción a ambas partes.- Con aprecio y sinceridad el príncipe del Oeste de Asbru saluda a la que posiblemente sea su propia maestra de la moneda, después de todo cuando muera el maestro Wort ella sera la maestra, y al morir Beld el sera el nuevo rey.
-Sera mejor que hagamos caso a las palabras de mi padre, descansemos que tenemos mucho para hacer en días venideros..- Se saluda con su padre y con Lynsah antes de con su hija dirigirse a la habitación de la pequeña, necesita trabar unas palabras con amada Shurelya antes de ir finalmente a descansar.
Lans Tartare- Mensajes : 376
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Fecha de inscripción : 21/12/2012
Localización : En el oeste de Asbru
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Re: Primer evento : Prologo de una guerra
La afilada mirada de Florian tuvo que mantenerse guardada, mientras el par de soldados del oeste revisaban cada aspecto de las credenciales de la inquisidora. Por suerte no hubo necesidad de esperar mas, los guardias finalmente dieron el visto bueno y procedieron a permitir la entrada de la monja a la ciudad, pero no sin antes dar una advertencia, un consejo que desafortunadamente cayo en malos oídos. -Hermana Florian, por favor.- les corrige, indicándoles que ella prefiere que se refieran a ella por su nombre religioso, esbozando su mal intento de sonrisa para evitar mas fricciones innecesarias.
Rápidamente la muchacha se adentra en la ciudad, dejando detrás a los soldados y deshaciéndose de su falsa calma, como si un balde de agua le hubiese borrado el maquillaje de buen humor. -hmph.- Refunfuña ella con mal humor a la vez que voltea la mirada a la entrada y la regresa hacia delante, siempre con sus manos en los bolsillos de la chaqueta. Siempre hubo un cierto "algo" en los soldados que molestaba a Florian, la cual solo se mostraba dulce con las personas ajenas a la guerra, los demás debían ganarse primero su simpatía para que ella no les echara malas miradas.
Suspiro profundo y dejo que todo aquello quedara atrás. Ahora se encontraba caminando por las calles de la ciudad, cuyas avenidas no han sido engullidas por la oscuridad, pues las antorchas mantienen las tinieblas a raya mientras un poco común repunte de actividad inunda el lugar, la guerra se avecina y es de esperarse que la gente no pueda dormir bien. Al cabo de un rato Florian llega a la plaza central, muy bonita por cierto, siguiendo a dos hombre raros que van por delante de ella, y como era de esperarse se dirigían al punto mas importante de la ciudad, así sin necesidad de pedir direcciones finalmente llega ella a la iglesia local, donde se supone que reside el único clérigo del puño de hierro de toda Asbru.
Pero al llegar la cleriga al lugar algo extraño llamo su atención, parecía que había bastante actividad en la capilla, pues mucha gente rondaba los alrededores y dentro del lugar se escuchaba mucha actividad. -a ver de que me perdí...- Dijo en voz baja para ella misma, y se dirigió a la entrada de la iglesia con toda la curiosidad y expectativa del mundo. Al llegar puso las manos sobre la puerta, empujándolas para poder abrirlas, pero estas no cedían, tal y como si hubieran cerrado desde adentro...raro. Si antes la situación había captado su curiosidad, ahora tenia su atención también, que estaría pasando ahí dentro? sera que el clérigo de ahí estaba en peligro? demasiadas preguntas, pocas respuestas, poco actuar, era momento de indagar sobre la situación. -oi! hay alguien ahí junto a la puerta!?- Grito ella, a la vez que golpeaba la puerta para hacerse notar mas. -hey! vengo del clero del Puño de Hierro, tengo unos asuntos que hablar con el sacerdote! podríais abrir por favor!? que pasaba con ese sitio que cuesta tanto entrar a algún lugar?
Rápidamente la muchacha se adentra en la ciudad, dejando detrás a los soldados y deshaciéndose de su falsa calma, como si un balde de agua le hubiese borrado el maquillaje de buen humor. -hmph.- Refunfuña ella con mal humor a la vez que voltea la mirada a la entrada y la regresa hacia delante, siempre con sus manos en los bolsillos de la chaqueta. Siempre hubo un cierto "algo" en los soldados que molestaba a Florian, la cual solo se mostraba dulce con las personas ajenas a la guerra, los demás debían ganarse primero su simpatía para que ella no les echara malas miradas.
Suspiro profundo y dejo que todo aquello quedara atrás. Ahora se encontraba caminando por las calles de la ciudad, cuyas avenidas no han sido engullidas por la oscuridad, pues las antorchas mantienen las tinieblas a raya mientras un poco común repunte de actividad inunda el lugar, la guerra se avecina y es de esperarse que la gente no pueda dormir bien. Al cabo de un rato Florian llega a la plaza central, muy bonita por cierto, siguiendo a dos hombre raros que van por delante de ella, y como era de esperarse se dirigían al punto mas importante de la ciudad, así sin necesidad de pedir direcciones finalmente llega ella a la iglesia local, donde se supone que reside el único clérigo del puño de hierro de toda Asbru.
Pero al llegar la cleriga al lugar algo extraño llamo su atención, parecía que había bastante actividad en la capilla, pues mucha gente rondaba los alrededores y dentro del lugar se escuchaba mucha actividad. -a ver de que me perdí...- Dijo en voz baja para ella misma, y se dirigió a la entrada de la iglesia con toda la curiosidad y expectativa del mundo. Al llegar puso las manos sobre la puerta, empujándolas para poder abrirlas, pero estas no cedían, tal y como si hubieran cerrado desde adentro...raro. Si antes la situación había captado su curiosidad, ahora tenia su atención también, que estaría pasando ahí dentro? sera que el clérigo de ahí estaba en peligro? demasiadas preguntas, pocas respuestas, poco actuar, era momento de indagar sobre la situación. -oi! hay alguien ahí junto a la puerta!?- Grito ella, a la vez que golpeaba la puerta para hacerse notar mas. -hey! vengo del clero del Puño de Hierro, tengo unos asuntos que hablar con el sacerdote! podríais abrir por favor!? que pasaba con ese sitio que cuesta tanto entrar a algún lugar?
Invitado- Invitado
Re: Primer evento : Prologo de una guerra
Los aires de guerra se sienten en la atmosfera; para mi es la oportunidad de que todos se maten entre si, que la desconfianza reine entre todos para asi mas facilmente poder manipularlos a mi antojo y poner mis manos sobre aquello que no poseo; pero primero debo hacerme de la confianza de algunos, entrar en sus circulos internos y asi poder mas facilmente utilizarlos. Seria facil si Asbru comenzaba a entrar en un estado de inestabilidad y se preparaba para la guerra. Pude observar con mis propios ojos como las cosechas eran rapidamente recogidas y se movilizan tropas en todas direcciones; mientras que yo me movilizo de aqui para alla, entre calles y callejones, apareciendo y desapreciendo; entre las sombras del dia y de la noche, vistiendo una piel blanca de oso; la cual cubre practicamente todo mi cuerpo, sin siquiera dejar una señal de que clase de ropa porto debajo; solo dejando ver parcialmente mi rostro, el unico lugar visible levemente de mi anatomia es solo mi boca y parte de mi nariz; mis ojos no podian verse, pero aun asi yo observo todo a traves de la piel del animal. Lucia como si es que fuera alguna clase de druida o un medico brujo de alguna tribu, pero con esto podria facilmente darme a mostrar.
Puedo ver que hay mucho movimiento, pero debo poner en marcha mi plan para asi comenzar a maquinar mi telaraña de mentiras, manipulacion y tragedias. Lo primero seria entrar en el circulo cercano del señor del castillo, habria que entrar en el circulo de los llamados maestros; los consejeros mas cercanos, eliminar a uno de ellos y tomar su lugar; tan facil como eso, luego seguirira desde ahi mi manipulacion del señor del castillo y con ello comenzar a mover mis hilos. Hasta que todo eso sucediera podria hacerme pasar por un ciudadano mas, alguien que en lo mas minimo llamara la atencion, tan simple como eso; probablemente ganarme la confianza del clerigo o de alguien con libre acceso al castillo y alli comenzar con todo.
Invitado- Invitado
Re: Primer evento : Prologo de una guerra
La madrugada entro de lleno en la noche de Asbru, hace frió incluso siendo casi verano. Aquellos con claros conocimientos de la supervivencia y el espacio tiempo saben que son mas de las tres de la madrugada y que mas adelante hará mas frió aun. Pero aun con ese frió algunos hombres de la villa permanecen despiertos y fueras de su casa, también algunas mujeres que venden sus cuerpos por algunas pocas monedas y algún que otro ratero que busca tentar su suerte en esa noche agitada de primavera. Una de esas tantas almas que rondan en la noche señalo cerca de donde ellos se encuentran.
-Esa es la posada, la mejor de por aquí, claro que han de golpear fuerte la puerta y probablemente les cobren mas caro por llegar a estas horas de la madrugada.-Con relativa facilidad el bardo con su educación y labia consigue la información que necesita para seguir adelante en la fría noche de la región.
La demonio vestida con piel de oso ya estaba en la ciudad desde hace algún tiempo, aunque actualmente no podría hacer mucho como están las cosas. Puede observar que hay algunos soldados dando vuelta, lo normal para mantener la seguridad de la ciudad, los verdaderos campamentos están fuera de la villa y en las fronteras que están siendo reforzadas rápidamente por si las dudas alguna otra región comenzara a atacar sin una declaración formal de guerra. Algunas mujeres buscan clientes para obtener dinero y algunos hombres hacen de clientes, otros pocos buscan los favores de las damas sin tener que pagar dinero por ello y otros pocos solo deambulan por allí sin parecer tener un destino fijo. Saphira para depender mas de la ayuda de la suerte que de sus propias habilidades, pero, dicen que a la suerte hay que ayudarla por lo que tendrá que poner mucho de su parte para que eso suceda.
Otro que necesita la labia del bardo es el guerrero que proviene del Norte de Asbru, la regio mas dura y fría de toda Asbru. Durante días ha estado viajando con un pequeño numero de hombres con dirección al suroeste de la región en busca de ayuda alimenticia, algo poco común en ellos, pero al no tener mucho dinero para comerciar quedan solo la alianza o la guerra, y extrañamente han optado algunos de ellos por probar algo prácticamente nuevo para esa región. Así al cabo de unos días de viaje a caballo logro ese grupo llegar a las fronteras que están vigiladas por soldados armados con armadura ligera y lanzas. Se ve claramente el vapor blanco salir de sus bocas, clásico en exploradores y soldados cuando han de pasar horas y días a la intemperie. Los soldados al verlos formaron en posición de batalla y uno de ellos se adelanto unos metros para visualizar mejor a la compañía que tienen a unos varios metros de ellos.
-¡¿Quien anda?! Que sepan que esta es la tierra del rey Beld Tartare, Señor y Protector de esta región. De no responder mis demandas tomaremos su presencia como una presencia enemiga.-Los soldados advierten a los recién llegados donde se encuentran y como han de proceder, de otra forma no quedara mas que tocar el cuerno y comenzar una batalla sangrienta y sin cuartel en defensa de la tierra que ellos protegen.
En la iglesia del Oeste el barullo se calmo por petición del ángel expulsado del cielo, aunque esas pobres gentes no saben de esas verdad del ángel, claro que tampoco saben que ha hecho un pacto con el diablo, de otra forma ya hubieran intentado lincharlo por falso y traidor. Claro que el verdadero silencio se hizo cuando alguien golpeo las puertas de ese sagrado recinto y y gritaba desde afuera para hacerse escuchar mejor. Las personas se miraron sin saber que hacer, dice la voz que proviene de afuera que proviene del Puño de Hierro, muchos conocen que es el Puño de Hierro, otros no tienen ni idea, ademas, pide hablar la voz femenina con el sacerdote del lugar el cual no se encuentra precisamente en ese momento allí en el sagrado recinto.
-¿Que hacemos ángel sagrado? ¿Abrimos la puerta o la mantenemos cerrada?- Las personas confundidas y algo alteradas acuden al ángel que esta por orden del sacerdote Bishop a cuidado de la iglesia mientras el no este allí presente.
En el frió y a la intemperie la creyente llegada del Puño de hierro intenta hacerse escuchar desde afuera del recinto sagrado. La nieve cae débilmente y la temperatura ha decaído bastante en las ultimas horas de la madrugada, un frió que ella nunca sintió ya que jamas la habían enviado tan al norte y tan lejos de su tierra natal. Dentro del recinto se hizo un silencio de muerte, pero nadie responde a las palabras de la monja que empieza a sentir mas manos y los pies entumecidos de tanto andar en medio del frió y la nieve que empieza ahora a caer lentamente sobre toda la región del Oeste.
-Esa es la posada, la mejor de por aquí, claro que han de golpear fuerte la puerta y probablemente les cobren mas caro por llegar a estas horas de la madrugada.-Con relativa facilidad el bardo con su educación y labia consigue la información que necesita para seguir adelante en la fría noche de la región.
La demonio vestida con piel de oso ya estaba en la ciudad desde hace algún tiempo, aunque actualmente no podría hacer mucho como están las cosas. Puede observar que hay algunos soldados dando vuelta, lo normal para mantener la seguridad de la ciudad, los verdaderos campamentos están fuera de la villa y en las fronteras que están siendo reforzadas rápidamente por si las dudas alguna otra región comenzara a atacar sin una declaración formal de guerra. Algunas mujeres buscan clientes para obtener dinero y algunos hombres hacen de clientes, otros pocos buscan los favores de las damas sin tener que pagar dinero por ello y otros pocos solo deambulan por allí sin parecer tener un destino fijo. Saphira para depender mas de la ayuda de la suerte que de sus propias habilidades, pero, dicen que a la suerte hay que ayudarla por lo que tendrá que poner mucho de su parte para que eso suceda.
Otro que necesita la labia del bardo es el guerrero que proviene del Norte de Asbru, la regio mas dura y fría de toda Asbru. Durante días ha estado viajando con un pequeño numero de hombres con dirección al suroeste de la región en busca de ayuda alimenticia, algo poco común en ellos, pero al no tener mucho dinero para comerciar quedan solo la alianza o la guerra, y extrañamente han optado algunos de ellos por probar algo prácticamente nuevo para esa región. Así al cabo de unos días de viaje a caballo logro ese grupo llegar a las fronteras que están vigiladas por soldados armados con armadura ligera y lanzas. Se ve claramente el vapor blanco salir de sus bocas, clásico en exploradores y soldados cuando han de pasar horas y días a la intemperie. Los soldados al verlos formaron en posición de batalla y uno de ellos se adelanto unos metros para visualizar mejor a la compañía que tienen a unos varios metros de ellos.
-¡¿Quien anda?! Que sepan que esta es la tierra del rey Beld Tartare, Señor y Protector de esta región. De no responder mis demandas tomaremos su presencia como una presencia enemiga.-Los soldados advierten a los recién llegados donde se encuentran y como han de proceder, de otra forma no quedara mas que tocar el cuerno y comenzar una batalla sangrienta y sin cuartel en defensa de la tierra que ellos protegen.
En la iglesia del Oeste el barullo se calmo por petición del ángel expulsado del cielo, aunque esas pobres gentes no saben de esas verdad del ángel, claro que tampoco saben que ha hecho un pacto con el diablo, de otra forma ya hubieran intentado lincharlo por falso y traidor. Claro que el verdadero silencio se hizo cuando alguien golpeo las puertas de ese sagrado recinto y y gritaba desde afuera para hacerse escuchar mejor. Las personas se miraron sin saber que hacer, dice la voz que proviene de afuera que proviene del Puño de Hierro, muchos conocen que es el Puño de Hierro, otros no tienen ni idea, ademas, pide hablar la voz femenina con el sacerdote del lugar el cual no se encuentra precisamente en ese momento allí en el sagrado recinto.
-¿Que hacemos ángel sagrado? ¿Abrimos la puerta o la mantenemos cerrada?- Las personas confundidas y algo alteradas acuden al ángel que esta por orden del sacerdote Bishop a cuidado de la iglesia mientras el no este allí presente.
En el frió y a la intemperie la creyente llegada del Puño de hierro intenta hacerse escuchar desde afuera del recinto sagrado. La nieve cae débilmente y la temperatura ha decaído bastante en las ultimas horas de la madrugada, un frió que ella nunca sintió ya que jamas la habían enviado tan al norte y tan lejos de su tierra natal. Dentro del recinto se hizo un silencio de muerte, pero nadie responde a las palabras de la monja que empieza a sentir mas manos y los pies entumecidos de tanto andar en medio del frió y la nieve que empieza ahora a caer lentamente sobre toda la región del Oeste.
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