Preparativos pre guerra

El clima del sur de Asbru es el clima más templado del todo ese territorio, en verano suelen llegar a los 10 grados de temperatura y en invierno a los 15 grados bajo cero, haciendo de ese lado de ese país un lugar muy acogedor para las tribus de Asbru.

En el territorio sur se puede cosechar muy bien, es una tierra fértil donde el frió solo los castiga realmente en invierno, haciendo que sea fácil cultivar y de mantener con bienestar al ganado. Los hombres enferman poco y tienen buen comercio con otras naciones o mercaderes que cruzan cerca de sus tierras, actuando más como comerciantes que como una tribu en sí.

A esas tierras han enviado a Alex, o mejor dicho el decidió ir por cuenta propia al tomar dicha misión en el Chivo Rojo, taberna que está ganando gran fama en diferentes partes del mundo.

Spoiler:

Los caminos a dicho territorio sin simples y están bastante protegidos, por lo que deambular en esa dirección fue sencillo. Se cruzó con más de un guerrero en esa dirección, muchos van a vender su espada al mejor postor, y apuesta al sur de Asbru. Luego los mercaderes con sus tropas ven y vienen, conviniendo que en guerra siempre hay más y más para vender, aunque el dinero escasee siempre se puede hacer préstamos con altos intereses si hay mucha desesperación en el proceso. Cuando ya estuvo en las fronteras visualizo que están fuertemente protegidas, han aprendido de sus errores del pasado y ahora están fuertemente fortificadas. La cola para ingresar al territorio es larga, pero avanza a buen ritmo, por lo que con esperar un par de horas puede suponer que podrá ingresar a ese país y obtener información precisa de dónde dirigirse. Las filas están separadas entre mercaderes, nobleza y reclutas, así que el debería de alistarse en esta última que parece ser la fila examinada de manera más minuciosa y ruda que las demás anteriormente nombradas.

Bien, habia tenido suerte en encontrar que me agradase, despues de todo solamente iva a tener que demostrar de nuevo a estos nuevos Generales que era alguien apto, no quería ser un "chico rudo", ni mucho menos que fuera tratado como un heroe...", solamente quería ser alguien de utilidad, alguien quien podría servir en el mundo, no alguien que quiera ganar un título.
El camino era agradable a pesar de lo que yo sabía, en el invierno era un pésimo lugar para mis atuendos, ya que mi chaqueta beige era ligera, sin embargo por ahora no era invierno, y los pastizales verdes se podían apreciar a lo lejos, así como pinos y frondosos arboles que tambien acompañaban el paisaje, y bueno mis pies no se estaban cansando o molestandose por el suelo, seguro los agricultores tendrían suerte en lam ayoría de la epoca dle año.
Ví a mercaderes queriendo vender diferentes brebajes, ropa...en fin muchas cosas que para mi, en este tiempo no era necesario.
Filas largas se podrían ver, pregunté por cual de las filas en la cual tenía que formarme, y una vez con información adquirida me formé en mi fila, la de los recrutas. Mi espada que me regalo Chiara estaba en su funda, mi navaja guardada en mi chaqueta...mis ganas, en mi cara.

Entre la gran diversidad de personas se encuentra Alex, encontró relativamente fácil el identificar donde ha de posicionarse para que atiendan a sus demandas, y tras unas buenas horas de espera su turno se vio realmente muy cerca de llegar. Desde donde está ahora puede ver que ellos son realmente muy observados, tanto por comerciantes y nobles como por ellos mismos, ni mencionar los soldados que los inspeccionan. Se fijan en que los reclutas estén sanos, que no porten enfermedades y que no tengan problemas físicos. A la mayoría los desnudan para asegurarse de que este todo en orden. Luego de una leve entrevista con preguntas simples a algunos de ellos los prueban en las armas, y después si depende sus capacidades ya poseídas o que pueden llegar a aprender los van enlistando de diferente manera.

-Tu el de allí, al frente- Ordeno uno de los soldados señalando a Alex, y otros mas como el pasaron al frente por orden de otros soldados. Lo inspeccionaron de mirada y luego palpándolo. - ¿Qué sabes hacer? ¿A qué te dedicas? ¿Cómo llegaste hasta aquí?- Esas son preguntas frecuentes allí en la frontera sur de Asbru. –Tienes armas, empúñalas y muestra que sabes hacer con ellas- Notan sus armas así que es obvio que iban a exigir algo como eso. Las mismas ordenes se escuchan cerca de él, muchos otros reclutas pasan por lo mismo siendo algunos de ellos buenos para el combate, otros no tanto, pero aun así luego de una revisión donde los desnudan los toman como empleados y los van acomodando según que creen que pueden llegar a hacer.

Formado pasaba por las penurias del hambre, pues no habia comido del todo bien, sin embargo los reclutas que no parecían debiles o sin enfermedades, parecían mas aptos que los otros, sin embargo utilizaban armas para anexar un "plus" al porque debería de quedarse en el ejercito. Cuando me griaron señalandome, miraron otros soldados mis atuendos y despues fueron a palparme...seguramente para comprobar si tenía algo escondido, si era un humano u otra criatura, si poseía armas...y bueno...empezaba el interrogatorio.
Se cocinar alimentos que lleven carne, se utilizar bien las armas filosas, aunque me manejo mejor con las armas pequeñas, como mi navaja, sin embargo podría utilizar una espada tambien. Llegué aqui por un anuncio en la taberna del Chivo rojo, y ya que me interesa la milicia, por eso vine hasta aqui.-aclaré.
Cuando me dijeron que utilizara mis armas para demostrar seguramente lo expresado,comencé a hacer tajos al aire con mi navaja de forma horizontal, vertical y cuando termine, la guardé. Saqué mi espada obsequiada e igual di una demostración al aire, claro manejaba mejor la navaja que con la espada, sin embargo creo que aprendería.
Al finalizar la guardé y espere indicaciones

No presto ninguna contra Alex a que lo revisen, lo cual es empezar con buen pie, en el ejército siempre suele ser duro, allí no hay lugar para niñerías y Alex con su experiencia lo sabe mejor que nadie. Fue escuchado con atención y a medida que él responde a las preguntas van tomando nota sobre lo que dice, probablemente lleven una especie de registro de los reclutas con sus supuestas habilidades.

-Así que cocinas y cuchillos…Suena lógico ¿Eres una especie de cocinero con agilidad o algo así?- Pregunto uno de esos hombres sonriendo, aunque no se puede decir si se estaba mofando de él o solo se ríe por reír. Lo miran atento mientras el demuestra sus habilidades primero con el cuchillo, reconocen que con el cuchillo le va bien, con la espada no tanto, pero ese no es un problema en un sitio como ese.

-Nada mal para ser un cocinero, con el entrenamiento adecuado podrás ser perfectamente un soldado- Siguen anotando, por lo visto les cayó bien Alex de alguna manera, y eso es mas por sus habilidades por su actitud, el que calla, va al grano y nos e queja, es claramente la actitud de un soldado y les sorprende que alguien tan joven la posea. -A la primera columna- Le señalan donde se tiene que acomodar y luego dejan de prestarle atención para llamar a los siguientes. Si observa bien a simple vista se podrá dar cuentas de las claras diferencias entre columnas, ahora el este con los que tienen cuerpo fuerte, claramente los que van camino a ser soldados. El resto no está allí, parece que van a realizar otros trabajos, posiblemente limpieza, forja y otras cosas de importancia para la guerra.

Me habían indicado que fuera a un lugar, no resongé y simplemente me encaminé a aquel lugar, sin embargo mis pupilas comenzaron a ver a los demas presentes de allí, no se si ofenderme porque yo estaba delgado y habia personas fuertes en este lado o si este lado que me habían colocado era para humillarme y despues colocarme con los de la otra fila. No me haría nada mal la limpieza, la comida y otras cosas, sin embargo necesitaba sentirme normal, necesitaba estar cerca de lo que estaba famirializado, tenía entendido que si tenia a una sargento o una general, no podía coquetearle, y alamejor a una compatriota, sin embargo esas no eran mis metas. Mis pupilas miraban a mis supervisores y a la demas gente, claramente bajo mi pinta seria a la vez tenia nerviosismo..¿que pasaría a continuación?..¿Con quienes trabajaría?...¿Honraría al rey que yo le mencioné que sería su fiel siervo al estar aqui?...Estaba emocionado y ya queria participar en lo que fuese que me pusiesen.

En verdad que Alex se encuentra con los más brutos de allí, aunque algunos son bastante atléticos, posiblemente sirvan para otros propósitos ya que algunos portan arcos simples. Debe recordar Alex que en una batalla hay todo tipo de soldados, no solo la infantería, por lo que debería recordar las batallas históricas de la antigüedad para darse una idea sobre ello.

Estuvieron allí hasta caído el atardecer, les trajeron comida y bebida en su espera, y pudo notar Alex que su comida, la de su grupo es mucho mejor que la de los demás, claramente estiman más a los hombres de armas que al resto de los reclutas. Ya por la noche llegaron varias carretas sin techo, y a los gritos fueron ordenando a los grupos de hombres y mujeres ya seleccionados cuales de las carretas debe abordar cada uno de ellos.

-¡Escuchen! Serán trasladados a diferentes fuertes del ejército, depende la necesidad de cada uno de esos lugares, así que alístensen y tomen sus lugares ordenados- Les explican a penas donde van y maso menos que harán allí, siendo un proceso algo lento al ser tantas personas, pero al menos no es nada alocado, porque si lo fuese ya hubiesen empezado muy mal si pensaban formar un ejército de ese modo. Tras un largo proceso de ordenarlos y guiar a la mayoría muchas de las carretas que llegaron por la noche estuvieron listas, aunque por lo que se escucha decir no partirán sino hasta llegado el amanecer.

La mayoría se mira con recelo, ninguno es allí familiar ni amigo del otro, ni conocido, por lo que son muy pocos los que están abiertos a una conversación amistosa.

Me sentía preparado, sin embargo a pesar de todo, me sentía un poco opacado, ya que aunque fuera de infantería o no, los demas estaban en mejores ambitos fisicos que yo de una u otra forma. La comida no estaba mal, me limite a comer de la forma mas limpia que me permitía el ambiente, sin embargo no deje de mirar hacia los alrededores, todos estaan como yo, sin interes alguno en iniciar amistades, ya que bueno todos seríamos repartidos en el reino pero a la vez se me hacía un poco mal, ya que todos serviríamos para lo mismo, algun vinculo tendríamos que crear.
Una vez en el lugar amontonado despues de pasar la fila larga que tuve que estar de pie y avanzar a penas y se moviesen, mi mirada miraba a todos en determinados momentos...si miraba mucho podría verme mal...y a lavez me preguntaba..¿A donde me llevarían?

Ciertamente la contextura física de Alex está muy por debajo de la de esos hombres rudos, después de todo viene de una época donde no se labra la tierra, no se cabalga, no se camina largas jornadas ya sea de día o de noche, con sol o con lluvia. Los esfuerzos físicos de su época se hacen con maquinarias, en cambio ahora esas cosas las hacen a sudor y sangre, a puro musculo y voluntad.
La mayoría de los allí presentes comió en silencio, pero de a poco comenzaron a soltarse un poco y a formarse grupos de conversación, pues la hora de la comida suele levantar los ánimos y más sabiendo cada quien para que ha sido seleccionado.

Las horas pasan y con ella la noche, más de uno se hecho a dormir allí donde estaba tratando de acomodarse como sea para poder conciliar el bendito sueño, y para suerte de muchos lo consiguen. La noche es bastante fresca, por lo que hay mantas para refugiarse del viento y del roció que durante las horas nocturnas se sienten y mucho, incluso estando casi en verano el clima allí exige abrigo. Los que ya han sido seleccionados la pasan mucho mejor que aquellos que todavía no se han presentado para la inspección, esos no recibieron abrigo ni alimentos por parte de las gentes del sur, por lo que se las tienen que arreglar como pueden. El día tardo en llegar, en esa región las noches son más largas que el día incluso en verano, por lo que el amanecer se hizo esperar su buen tiempo. Tras un desayuno rápido tal y como lo habían planeado se pusieron en marcha, decenas de carretas y carromatos marchan cargados de gente en comienzo en una sola direcciones, y pasando los días se empiezan a dividir en diferentes direcciones y caminos.

Alex junto a muchos otros que forman el grupo de gente con actitud de armas es llevado a la capital del sur de Asbru, ellos puede decirse que dé comienzo son los favoritos de los reclutas, pues los guerreros son estrictamente necesarios para la guerra.
No podían saberlo aun pero, a medido que más se adentren en ese territorio, cuanto más al centro de dirigiesen más frio empezarían a sentir. A pesar de ello los verdes de la tierra son bien visibles, y las grandes montañas a veces parecen acercarse más y más.

La comida fue satisfactoria par la epoca y mis ojos a lavez veían a las diferentes personas que por x o y razón serían mis compañeros, me preguntbaa sus habilidades. Claro estaba que esto eran trabajos mas fuertes, ahora...la comida a veces me preguntaba..¿me lo merecía?...Sabia usar bien la navaja, y no etaba entre uno de los muchos grupos, no obstante... ellos sabrían usar el hacha y seguramente los martillos, la espada o probablemente un arco...yo nunca habia usado un rifle de precisión, y el arma de mano a pesar de poder utilizarla, aqui no me serviría...tendría que hacer amistades para aprender a seguir usando lo demas.
Me dormí sobre mi chaqueta, sin embargo terminé poniendomela cuando el frio azotó el lugar quedandome de pie.
Me mantenía al margen, solo mirando, respirando y escuchando.

En los cruce de caminos se fueron separando las carretas, de a poco los grandes grupos de carretas y carromatos se redujeron solo a un numero de dos o tres por grupo, haciendo que con menos gente a bordo no hubiera tanto ruido, pero al haber menos personas se fueron forzando conversaciones cada vez más seguido, y teniendo así cada quien charla y conocimiento de sus compañeros de viaje. Una semana entera fue lo que viajaron, así que tuvieron bastante tiempo para conversar. Pararon solo para comer, para hacer sus necesidades cada tanto y dormir. La gente de Asbru, esas que están a cargo de ellos los trataron dentro de todo bien, explicando que ellos una vez entrenados y con valentía serán parte crucial cuando llegue la hora de pelea, así que esperan que se puedan llevar sin problemas. De momento las tierras se mantienen verdes, pero por las mañanas claramente se nota los pastos helados, y más nubes grises aparecen en los cielos a medida que avanzan, claramente cuanto más se adentran en ese territorio más frio se hace todo a su alrededor.
Para el mediodía de ese día ahora más gris que en días anteriores empezó a visualizarse a lo lejos una fortaleza, y los que conducen las carretas festejaron. Si bien el camino fue bastante simple esos hombres festejaron como si hubieran conseguido una misión imposible.

Spoiler:

-¡Miren reclutas!- Señalo hacia el noreste- Una de las fortalezas del Señor Silfur, la más importante de todas, aquí se entrenaran y se harán soldados de verdad- El hombre habla emocionado, y claramente la fortaleza se ve impresionante y muy solida. Se nota que no tiene muchos años de estar allí, probablemente tenga una década como mucho, por lo cual se debe haber invertido una inmensa cantidad de dinero en pocos años, dinero y recursos. Siguieron la marcha y a medida que se acercaban los reclutas se emocionaban también, pues muchos de ellos no habían visto un castillo en su vida. Hombres armados salieron del castillo yendo al encuentro de los reclutas, se saludaron con los que conducen las carretas y carromatos y luego de lanzar un par de miradas y gritos a los recién llegados los escoltaron hasta los pies de ese importante y notable castillo.

-¡Muy bien todos abajo! ¡Todos abajo dije!-Esa orden de repitió de un lado a otro, esos sujetos armados deben ser caballeros o similares, o al menos ser algo de importancia ya que desde que llegaron a reunirse con los reclutas no han parado de dar las ordenes allí.

Nos fuimos separando poco a poco supongo que a razón de que cambiarian las rutas para la servidumbre y para los guerreros y éstos ultimos dividiendolos en 2 "clases distintas". Me limite a comer y hacer mis necesidades y dormir...apenas hablaba con los demás lo necesario, opinando de la comida y de lo que nos esperaba, siendo en la mayoría dle tiempo positivo. El pasto verde y fresco al igual que el clima, eso daba un gran ambiente a la situación, no estaba todo tan apestoso y de alguna forma extraña. Sin embargo las nubes grises dan ambiente correcto al nuevo territorio gris y oscuro...Ya estabamos por llegar...y en efecto, al llegar me dí cuenta del gran edificio estable y fuerte que hacía combinación con el ambiente. Obedecí a bajar de donde venía dejando pasar primero a mis compañeros de adelante...y decidí permanecer callado aun, desconfiado en parte de lo que me esperaba.

Luego de largo rato de gritos y órdenes de un lado a otro todos los reclutas terminaron en tierra, de pie formados los unos con los otros de forma ordenada.  La forma en que dividieron los grupos fue sencilla, armas cuerpo a cuerpo y armas a distancia. Espadas, hachas, lanzas, mazos, cuchillos, puños, todo lo que se pueda empuñar en un combate cuerpo a cuerpo estuvo del lado derecho de los que parecen ser los señores allí. Del lado izquierda estuvo la gente con jabalina, arco, ballesta, honda y otros más que extrañamente no tienen armas.

-¡Atención reclutas! Firmes y con la cabeza al frente, que se presenta ante nosotros nuestra princesa, la mismísima Lady Harder, la mujer por la cual darán su vida, desde hoy no hay dioses ni otras lealtades ¡Solo la lealtad a Lady Harder!- Eso explica mucho el porqué están tan serios y exaltados los “jefes” y se ponen en estrictos con los reclutas, aquella que les paga, su jefe o señora, lo que sea, se le puede dar muchos títulos , ella estará presente eso día frente a todos ellos.

Al buen rato de esperar donde todo fue grito de los jefes se hizo la calma, varios soldados con lanzas y gente  caballo muy bien vestidos y armados desfilaron hacia ellos, y luego de un tiempo de observarlos y de acomodarse de fue acercando letrina que lleva dentro de sí a la princesa de esa región.  Cuatro hombres claramente esclavos llevan en sus hombros dicha letrina, para Alex es como si estuviera viendo a Cleopatra o similar, pues cuando ella descendió de su medio de trasporte todos se arrodillaron, y los soldados y otros nobles de Asbru se aseguraron de que todos los hicieran, pues el que no se arrodillaba recibió un golpe en la nuca, en la espalda o en las piernas para que aprendiese a cómo comportarse ante su “eminencia”.

Spoiler:

La señora de esas tierras claramente no se parece en nada a las personas que están allí, tiene un aire muy noble, demasiado fina, puede compararla Alex con una noble de la Isla de las Brumas que no tiene nada que ver con una región tan nórdica y salvaje como lo es Asbru.

-Mis estimados valientes, en nombre de mi padre y mío les doy la bienvenida a mis preciadas tierras de Asbru. Puede que muchos no lo sepan mis valientes, pero este país está dividido actualmente en cuatro partes, habiendo cuatro líderes que se disputan este lugar, y muchos de ellos no tienen intención siquiera de unirse a otros manteniendo la lejanía y los conflictos a la orden del día sin parar…-Suspira y hace una pausa observando a los presentes antes de volver a tomar la palabra. –Mi intención es defender estas tierras y en lo posible conseguir la unión definitiva de toda Asbru, y por esa razón los necesito, necesito de todos ustedes, hoy extraños, mañana héroes de este país.-Sus hombres golpearon sus armas y la ovacionaron, ella sonríe y los saluda a todos como si los conociera de toda la vida, y después se acerca un poco más a los nuevos reclutas los cuales son desde ahora una muy buena fuerza con la que contar, solo necesitan ser entrenados adecuadamente y servirán así bien a sus propósitos.

La mayoría de los reclutas parece contento y satisfecho, por algunas razones parece que la mujer les cae bien y no es para menos. La forma de hablar, de caminar y de observar difiere mucho de lo que ellos esperaban, y lo que esperaban era más gente mandona y gritona que los trate mal, y sin embargo han sido sorprendidos con algo totalmente diferente e inesperado como lo es ella.

Ordenes y ordenes y mis ojos seguian mirando a los alrededores y a los soldados que de vez en cuando tambien me señalaban...en fin por ahora esaba del lado derecho, ya que poseía una espada (aunque no sabia utilizarle) y una navaja. Me llamó la atención cuando un hombre con voz vigorosa mencionó que Lady Harder era como "nuestro pastor"...osea todo era basado en ella y lo que ella dijer sería ley..."clásico" en la milicia.
De inmediato los cascos de los caballos comenzaron a sonar, así como soldados con lanzas que pronto a pronto comenzaron a mirarnos...mi rostro seguía indeferennte, no era nada nuevo para mí esto...sin embargo me sorprendió que la mujer claramente en un vestido elegante, sensual y delicado se presentara ante nosotros así.

En cuestión de segundos ya me encontraba viendo el suelo, incado sin la siquiera intención de verla...Por respeto aqui aparte de ser un extraño y de tierras lejanas, así como de otro tiempo..simplemente me hacían ver que no merecía mirarla de momento.
Bien la historia aunque tuvo sus variaciones con lo que pensé, claramente tenía similitud con ello. No quería ser una heroina pero sin embargo buscaba la paz o al menos mantener unido lo poco que tiene y despues extenderlo, su voz decidida y suave trata de hacernos importante..probablemente nos quiere elevar el ego para asegurar la fidelidad y nuestro orgullode pertenecer aqui....

Los sonidos de sus zapatos comenzaron a sonar, claramente estaba pasando para vernos...pero bueno ya sabía probablemente lo que vendría ante esa apariencia comprensiva que habia demostrado, como tal debiamos servirle sin objetar nada...por ahora pensaba que ella quería sembrar confianza y despues veríamos otros aspectos de ella...así que no era tan iluso para creer que ese comportamiento sería para siempre.....¿o acaso quería que fuera como en mi epoca?...¿o era muy negativo de mi parte?.
Lo unico de lo que no podía dudar es que vería mis atuendos distintos a el de los demas....y haría preguntas os e quedaría con dichas dudas ..y que hasta el momento mi vista no se ha movido de su lugar: El suelo es lo unico que ven.

Pocos líderes se pasean tan de cerca y en medio de sus soldados, en especial si estos son recién llegados, pero esa mujer ha leído suficiente como para saber que ese riesgo bien vale la pena. Los que puede ver de cerca no son nada espectacular, aunque no tiene quejas de ello, después de todo no esperaba mucho de ese reclutamiento tan vulgar e improvisado. Lo más probable es que la mayoría sea mercenario, asesino, ladrón o campesino, ese es el común de la gente. Tal vez algún pescador y algún hombre que suele picar piedra o levantar paredes se encuentre allí también, pero no más que eso. Algunos la miraron sonrientes, otros serios, unos pocos temerosos, y algunos osados con lujuria en la mirada, después de todo la mayoría no acepta a una mujer como líder, pero a otros le excita la idea de dar la vida por una mujer, de ser su héroe o amante, y eso es algo que ella puede usar a su favor, eso y muchas cosas más, lo que sea con tal de ganar. Poco más atrás de ella dos hombres de su confianza bien armados caminan, parecieran su guardia personal porque claramente saben lo que hacen. La mujer si noto a Alex al pasar, pero no iba a indagarlo allí mismo, solo lo recordaría y con lo llamativo que es no será difícil de encontrar. Lo miro con disimulo para que no todos lo miren y luego haya problemas, por lo que paso de largo mientras el mantiene la mirada fija en el suelo, eso es raro, no cree la mujer que sea de los que le tiene miedo, con ese atuendo duda que le tenga miedo a una mujer.

Pasaron los minutos y finalmente esa mujer regreso al sitio de donde les había hablado en un comienzo, entonces con la mirada puesta en ellos volvió a tomar la palabra ante todos los presentes.

-No teman, sean valientes, no irán solo a la muerte, aquel bando que mas muertos tiene es el que pierde, y a mí personalmente me gusta ganar. Algunos buenos guerreros los entrenaran, serán preparados para el combate y la guerra, tendrán alimento, techo, armas y todo lo necesario para que puedan vencer y vivir.- Eso si alegra a muchos, porque para pagarle a tanto gente sin duda hay que tener dinero, y para mantenerlos y armarlo mucho mas, y eso siempre es prometedor. Los que están allí no pelean por su país, ni por sus valores, pelean por dinero y por sus vidas, y tal vez alguno pueda sentirse querido en esas nuevas tierras y hacerlas su hogar, pero de comienzo el dinero y la vida es la prioridad.

-Tiempo de trabajar, montaremos un pueblo de carpas a quinientos metros de aquí mirando al norte, que se sepa que estamos, allí plantearemos nuestro campamento ¡A moverse!- Y con esa orden de uno de los soldados empezaron a marchar al norte, no muy lejos, unos quinientos metros donde comenzarían a levantar carpas, a formas cuarteles, lugares de trabajo de entrenamiento y todo lo necesario para que empiece la formación de soldados en masa.

El sonido de los zapatos de la mujer pronto se alejaron de frente mio, y despues otras palabras que pudieran someter aun mas a los "esclavos" armados para la batalla se engendraron. La vida de si mismo es algo muy importante, ahora si una dama [el lado femenino en este caso humano, pues habia el femenino de distintas razas], era un ser a veces incomprensible y engañoso, hasta podría denominarseles "interesadas". En este caso la "General", seducía con las palabras pues no veía yo ahorita la comida que prometía ni las armas, aunque sí el techo... Pelear por una mujer era algo mas grande...y ahora sumemos que esta persona tiene abasto suficiente para los hombres que permanezcan vivos...y porque no, agreguemos el hecho de que protegeremos mas vidas y honores que la de ella...Seríamos útiles.

Dada ya las instrucciones me levanté y caminé junto con el resto, mirando sus rostros para percatarme que mis pensamientos estaban en lo correcto y que el espíritu de mi hermano estaba allí a lo lejos mirándome de alguna forma desafiante y decepcionada...enojado.

No deje que eso me importara mucho y segui mi caminar, y despues juntándome con un puñado de hombres, comencé a ayudarles a levantar una carpa...hacía mucho que no hacía ejercicio así que tenía que utilizar ambas manos y exigir a mi cuerpo un poco mas de fuerza...

Mientras ellos trabajan en levantar aquellas que serán sus casas de momento la princesa se retira a su castillo en compañía de mucha de las gentes de su confianza. Tienen muchas herramientas para trabajar y no faltan insumos, menos manos de obra, por lo que conforme pasando las horas el gran campamento que a varios cientos de metros del castillo se levanta toma su forma. Por la tarde tuvieron un descanso para comer y beber, el descanso fue bastante amplio, les duro casi dos horas, les llego la noche de ese modo pues allí anochece bastante rápido lo que hizo que las hogueras y antorchas se encendieran por doquier proveyendo así de calor y luminosidad todo el campamento que en verdad necesita de esas dos cosas en particular.
Con las horas que pasaron, además del viaje anterior, la comida y el discurso de la princesa sumado al trabajo que está realizando empiezan a formarse lazos, por lo que las charlas comienzan a oírse más a menudo así como alguna que otra risa que resalta por sobre las voces del lugar, buena señal sin duda. Más lejos de ellos hay gran movimiento, por lo visto una gran cantidad de hombres están listos para partir, probablemente exploradores o guerreros ya juramentados que tienen sus trabajos y obligaciones ya asignados.

Los cielos nublados lucen realmente oscuros y amenazantes, aunque los lugareños y exploradores saben que no habrá tormenta y posiblemente tampoco nevadas, eso es bueno ya que les permitirá tener un buen descanso. Algunos soldados de importancia y caballeros van pasando por el campamento para asegurarse de que todo está en orden y además charlan con los reclutas y les informan sobre lo que va sucediendo en el país desde hace algunos días.

-Mañana hay concilio de reyes, los cuatro reyes de Asbru entraran en territorio sagrado a saldar diferencias, ya sea con las palabras o con las armas. Muchos de los nuestros partirán a acompañar a nuestro rey, pero no ustedes, ustedes están muy verdes aun les falta mucho. Así que descansen, pues más adelante posiblemente no tendrán tantas comodidades como las tienen ahora.- Con esa información esos hombres dan por cumplida su misión de esa noche, informar y ordenar el descanso.

Ayudar, levantar, construir, replicar conversaciones apenas importantes o solo para no sentirse encerrado en una caja...eso era lo que estaba pasando de momento en mi vida en estos instante, pensando en porque una chica nos dirigiría y el pensar en que tipo de lecciones habra conseguido de parte de un estratega militar, de su padre o de quien fuese para llegar a controlar bien el animo y las tropas que ahora poseía...La comida, la bebida...los avances de cada uno de nosotros se hacía presente cada ves mas doblegados y mostrados ante nosotros o lo que haciamos...Todo tenía un significado. A la hora de dormir, el sueño no pudo conciliarse...por lo que salí de donde me dispuse a dormir...y caminando me encontré en medio de las carpas, sentándome en medio y despues de unos segundos acostado viendo el anochecer....sin importarme las ideas o los pensamientos de los demás si me veían

En unas cuantas horas estuvo todo listo, un magnifico campamento al que no le falta nada. Con tanto brazo fuerte para trabajar y mujeres para encargarse de aquello que no necesita musculo las cosas salieron muy bien allí, y tras los soldados y caballeros de Asbru dar las noticias sobre el día de mañana estos fueron a descansar dando así permiso a los reclutas para cenar y posteriormente finalmente descansar como dios manda. A diferencia de la mayoría de los allí presentes Alex no pudo dormir en la comodidad y resguardo de la carpa y salió a caminar por el campamento bajo el manto nocturno. Cierto es que no lo miraron bien los pocos que estaban allí, y es lógico, lo ven como una posible amenaza, como un ratero y ladrón como mínimo, un oportunista buscando un descuidado.

Con el pasar de las horas todos se fueron durmiendo y el opto por dormir a la intemperie, grave error, las bajas temperaturas de la noche no son para andar durmiendo fuera, y eso es algo que descubrirá al despertarse por la mañana todo mojado debido al roció que cayó durante toda la noche. La mañana tardo en llegar, en esa región los días son cortos y las noches muy largas, y las temperaturas siempre bajas aunque en el sur con un buen abrigo no se tiene dificultades. El campamento comienza a despertar rápidamente, los caballeros del sur se encargan de despertar y levantar a los reclutas rápidamente a base de gritos, sacudidas e insultos en el caso de los más rebeldes. Una gran comitiva está en las cercanías, deben ser fácil miles de ellos, un par de miles de guerreros marchando tras la princesa y de seguro el rey también está allí presente. Ellos al ser reclutas no etan obligados a ir, pero si a trabajar y a prepararse para servir no como simples hombres, sino como guerreros juramentados a la princesa heredera de todo el sur de Asbru la cual planea conquistarlo por completo.

-¡Vamos holgazanes! ¡A trabajar! Caballeros juramentados ya están en marcha a la batalla y ustedes ni siquiera pueden quitar el culo de la cama- Les van gritando y ordenando, primero desayunaran claro pero para eso deben despertar y limpiar, preparar el lugar para el desayuno, preparar el desayuno en sí, demasiadas cosas para hacer desde muy temprano en la mañana, en la fría mañana.

El frio recorrio mi cuerpo, terminé conciliando el sueño en pocas horas despues de ello y claramente me despertaba en las madrugadas de vez en cuando...Cuando me levanté, fue a base de gritos por o que me desperté tranquilamente, era adecuado para mi este lugar, los gritos...y aunque no habia trompetas, seguramente solo el eco de la voz grave de los soldados harían efecto. Me estiré e hice unas 3 sentadillas, terminando me dirigí a limpiar el lugar, no pensaba ser un holgazan y perder lugar y respeto. Cuando termine de limpiar comencé a preparar algo simple con los ingredientes, no podía preparar un festin. Cuadno terminé de comer simplemente me quede mirando.

Para un soldado como Alex ese ambiente es un ambiente común y corriente, ciertamente no hay trompetas pero se grita bastante fuerte, además el sonido de los cascos de los caballos hace un buen trabajo también. Su cuerpo siente el paso del frio, en especial con las ropas húmedas, si hubiese sido invierno a esas alturas estaría con problemas para respirar y mover el cuerpo, suerte para el que no lo es. A diferencia de Alex no muchos están tan dispuestos a ayudar, la mayoría se considera hombres de armas y más de uno cree que cosas como limpiar o cocinar son cosas de mujeres, mentalidad de la época que poco importa a los superiores, razón por la cual más de un soldado se acercó y observo curioso a Alex, alguno de forma neutra y otros con gestos aprobando su labor. Otros se unieron a Alex luego entendiendo que cocinando tendrán la mejor parte, además si nadie cocina no habrá comida para nadie y eso sería un caos.

Con el paso de las horas el campamento estuvo despierto y operable, tienen para comer mucha carne y algo de verdura, pan no les falta y agua y vino para beber. La masa de hombres a lo lejos comenzó su marcha hacia el norte mientras los reclutas terminando de desayunar se dividen ahora en dos grupos, los que limpian y asisten en lo necesario y en los puramente combatientes, a elección de cada hombre y mujer allí presente.

-Vamos reclutas, elijan que serán el día de hoy, no son ni más ni menos recluta no importa lo que hagan-Para muchos es difícil comprender, pero esa es la verdad solo que esa época no están tan bien educados como para tener una gran perspectiva de cada caso.
En poco tiempo se puede notar que son muchos más los combatientes que los que eligieron ser asistentes, casi cinco a uno los superan y eso puede ser tan bueno como malo.

Cocinar era un gusto y una especialidad mia así que solamente tendría que ser precaido con los soldados que tuvieran gustos refinados o gustos para gritarle al cocinero aunque éste tenga la razón, suponía que a pesar que unos veían mal el cocinar dejandoselo a una mujer a mi me parecía peor no tener algo con que abrigarme en la noche mas que mi chaqueta ligera que en sí, lo que me terminaba dando para dormir era el frio...por el frio y el cansancio dormia pero no muy agusto...-Seré un cocinero si es posible-mencioné en voz alta, sin importar de los que criticasen que un hombre cocinase por ocio

Al poco tiempo de escucharse el grito de los soldados se pudo ver que por cada persona que eligió las tareas de no combatiente hay diez que eligieron las armas, pero eso es de esperarse y más en una época como esa donde todos quieren fama, dinero, mujeres y cosas así, y eso se logra matando muchos o matando gente importante. De un lado mucho ruido y mucho musculo, o al menos simulan algunos los músculos, del otro lado los que eligen algo mas pacifico y menos varonil. Los aspirantes a soldados se quedaron allí agrupados esperando a que los otros sean llevado a las cocinas e hicieran su trabajo el cual es darles de comer, así de machista y perezosa es la mente de esos sujetos siendo la mayoría puro musculo y poco cerebro.

Al tiempo de empezar a cocinar y a limpiar cuando todo estuvo medianamente en orden y el olor a comida comenzó a expandirse hacia fuera de las cocinas los soldados no dudaron e ir catando lo que se cocina, para ellos esa es la mejor parte del trabajo ya que les permite tener más comida gratis aun.

-Al fin comida de la buena, para un soldado esto es un manjar- Hay varios que cocinan bien allí, no solo mujeres, algún que otro hombre como Alex se destaca mucho en la cocina y esos pueden convertirse en los favoritos de los soldados y oficiales si saben cómo agradarles.
La cosa se puso tensa cuando empezaron a exigir comida los de afuera, pero un par de gritos y amenazas de armas de por medio los calmaron, claramente un soldado tiene mucha más autoridad que un recluta y lo hicieron notar de inmediato.

-A ver, algunos de ustedes responda ¿Qué pueden ofrecer ya a los de afuera? Si no se calman tendremos que matar a más de uno para que se calmen- Hablan con los cocineros para saber que se puede ir sirviendo en las mesas para reclutas antes de que la sangre empiece a correr.
La mayoría tras conversarlo un poco llega a la conclusión de que el pan, la avena, arroz y fideos se pueden ir sirviendo aunque algunos comerán no tan cocidos la comida no les hará nada de daño.

-Que se haga entonces, algunos que sigan cocinando, otros que vayan sirviendo.- Se ordeno de inmediato de esa forma y el movimiento de verdad comenzó a la brevedad con gente yendo y viniendo de la cocina al patio, del patio a la cocina y gente peleándose por lugares, sillas, comida, soldados poniendo orden y golpeando a más de uno para que se quede quieto y sin causar problemas.

Vale ahora todo estaba marchando  extraño, los soldados al ser de mayor rango y al querer algo mas que avena, probablemente querrían algo de rico aparte de eso.  

Verifique lo que teniamos y entonces para mi fortuna, recordé que el Salmón  tenía propiedades  deliciosas y que ayudarían a los soldados con sus vitaminas y lo que su cuerpo requeriría.
Teniendo el salmón a la mano, lo corté hasta tener 4 rodajas y al no tener aceite de oliva, la pimienta y la sal disponibles en esta época. Procure limpiar las rodajas con el fin de quitarle las spinas y enjuagar el salmón y despues marinar el salmón, y añadir sal y pimienta al tacto...y así  comencé a ir preparando rodajas de salmón para  los soldados, indicando que se los llevasen, que yo se los habia preparado.

Lo menos que quería era  que hubiese asesinatos entre compañeros. Sabía que si no bebias agua por 3 dias podrías morir, pero a la vez una persona sin alimentos por cantidad de horas podrías ponerte de mal humor y una persona de mal humor a veces comete mas errores que un bandido en un lugar respetable y el cual tamien merece responsabilidad, como la milicia.

A pesar de su sorpresa fue rápido en reaccionar el ex soldado, Alex fue inteligente y encontró la forma de hacer un buen trabajo y ponerse entre los favoritos de los soldados del sur de Asbru en poco tiempo. Verificando en sus alrededores y hablando con sus compañeros supo todo lo que tiene allí a mano y escogió el salmón al salazón para preparar, tiene todo lo necesario allí por lo que no tiene problemas en prepararlo. Sus compañeros le ayudaron en todo lo que necesito y a diferencia de los tipos de afuera en la cocina están dentro de todo bastante alegres, algo presionados pero nada que ver con cómo están afuera. Muchos de allí comen mientras trabajan, sus vidas no corren peligro y hacen dentro de todo lo que les gusta, por lo que el ambiente allí es bastante bueno. Algún que otro recluta quiso hacerse el loco exigiendo de mas y de mala manera, pero todo cocinero sabe usar un cuchillo y no todos se asustan así como así por lo que hubo muchas risas de los soldados presentes.

-¿Y así esperas ser soldado recluta? ¡Te acaba de patear el culo el cocinero!- Las risas en ese lugar fueron muchas, y probablemente ese carnicero pueda tener problemas más adelante, pero de momento vive su momento de gloria al dejar en ridículo a ese recluta que no conoce aun su lugar en el mundo. Comen los soldados disfrutando de la comida y van llevando parte de la comida a los reclutas que ahora se callan al tener la boca llena de comida. Está claro que no son disciplinados como debe ser un ejército, les falta la disciplina, algo que deben enseñarle los ya soldados experimentados de Asbru. La hora se la comida se extiende bastante, y luego de un breve descanso los soldados van llevando a los reclutas al aire libre alejado del campamento para ponerlos a entrenar. Primero corren, hacen flexiones y les empiezan a enseñar el uso de las armas, no hay mucha filosofía allí, van directo al grano. Puede notar Alex que usan mucho el hacha, el hacha de mano y el hacha doble así como al espada, y lo más común la lanza. No se ve tanto el martillo y otros usan arco pero no ballesta, curiosidades ya que la ballesta si bien sale cara es fácil y mortal de usar.