El fuego resurge

Los rayos de sol calentaban mis alas por aquella tierra fria y desolada. El viento rugia y complicaba las maniobras mientras las nubes de tormenta ocultaban mi aspecto antinatural y enfriaban las escamas. Al ascender sobre las nubes,  despues de decenas de años volvia a ver un paraiso de sol y calor, bajo un mar blanco y gris. Alli era libre despues de años. La oscuridad de la noche nunca me habia gustado tanto, era mucho mejor esa luz calida, y el cielo azul. La presion comenzaba a molestar, por lo que tendria que descender, a mas altura de la necesaria, costaba respirar y podian congelarse las alas. Asi que lentamente, y planeando fui dscendiendo hacia las nubes. Desde alli era mas complicado bajar, sobre todo si habian pueblos o ciudades cerca. No era bueno que viesen a una bestia asi despues de tanto tiempo sin conocimientos de magia.  

Cuando porfin vi un buen lugar para aterrizar plegue las alas y cai en picado tan veloz como pude y finalmente aterricé en una explanada de nieve y rocas.  Entonces sonrei sintiendome libre y me converti en humana, pero esta vez sin ataduras, sin ropa ni telas, salvaje como un animal, y eso era mas o menos lo que era. Solo con una bolsa donde guardaba las armas y algo de dinero y dos joyas de gran valor provenientes de la cueva. Ahora nadie me veia, por ello no hacia falta seguir tradiciones absurdas. Comence a bajar de aquella montaña para llegar a un valle lleno de arboles, donde vivian mas seres vivos que en la parte alta de la montaña. Alli me movi buscando una cabra o algun ciervo, un animal para poder comer sin armar mucho lio. Por la noche era dificil cazar, pero ahora de dia, todo era mucho mejor.  ¿la guerra? ahora mismo no tenia mucho interes en ella, ahora tenia algo mucho mejor y podia ir donde quisiera.  

Andaba por la orilla de un pequeño rio entre arboles sin escuchar nada en absoluto. Solo naturaleza pura como pajaros o el fluir del agua. Entonces escuche un ruido mas abajo de donde estaba, el ruido de unos arbustos. El sonido provenia de al lado de una charca mas abajo de la montaña. La pregunta era si era un ciervo o algo mas, quizas incluso mas de uno. Asi que agarre mi daga de la bolsa de tela y comence a bajar sigilosamente.

Uno de los tantos dias, decidi bajar de las montañas hacia los valles en busca de que comer; practicamente cazar como lo haria otro animal mas; escondiendome y asechando a mi presa, esperando a alguien desprevenido que se convertiria en mi almuerzo. Entre los valles, segui un pequeño rio, de seguro aqui seria mas facil atrapar a una presa, y asi fue; no tuve que ser muy paciente para encontrar un ciervo tomando agua; del cual no tarde en dar un salto sobre el y atrparlo con mis garras y morderle el cuello hasta darle muerte. Cuando lo comence a devorar, algo me puso en alerta; mis oidos se colocaron en alerta y comence a escuchar y oler algo que parecia no ser de aqui; alguna criatura que parecia acercarse; podia escuchar unos arbustos moverse, fue entonces que empece a gruñir para ver si logro espantarlo o amenazarlo con que se fuera de aqui, estuve esperando alli al lado de mi presa a que se apareciera, para ver que tanta amenaza seria.

Los viajes eran cada vez  mas tranquilos, por ello aquellos ruidos me parecieron muy misteriosos. Asi que me acerque sigilosamente. Al llegar, pude ver como un lobo habia cazado un ciervo. Se me habian adelantado, otro animal habia cazado mi posible presa.  Sali de entre los arbustos y vi como el animal me sacaba los dientes amenazante, sin embargo no me movi hacia atras ni sali huyendo, simplemente avance hasta la otra orilla del rio y me sente. Si era solo un lobo no se comeria la pieza entera, y siendo sincera no tenia muchas ganas de seguir buscando si una gran parte del ciervo iba a ser desperdiciada.

Mire al animal relajada y clave el arma en el suelo, despues cree fuego con un chasquido de dedos y deje que las llamas prendiesen unas ramas que estaban cerca para formar una hoguera. Luego simplemente espere alerta por si el animal tambien pretendia matarme a mi.


off(perdonar por la brevedad, pero con problemas en casa y visitas he tenido poco tiempo para pensar o hacerlo continuo y bien)

Era claramente un momento complicado, sin embargo todo podia relajarse con paciencia y respeto. O podria haber sido asi de no haber otro animal cerca. Pero no..no era eso...Rapidamente me aparte para evitar ser dañada y vi como el lobo salio tras un zorro con varias colas dejando la comida sin proteccion. Aveces no entendia el instinto, aunque podria ser que esos seres no fuesen animales del todo, que fuesen algo mas.

Miré la comida y me acerque a ella para arrancar un trozo de carne, lo suficiente para durar unas cuantas horas. Lo guarde  y les segui por la espesura. Avance metros y metros, siguiendo el sonido de sus pasos y el rastro en si de las huellas y pisadas. El zorro parecia borrar el rastro con las colas, pero el lobo marcaba el camino.

Finalmente, volvi a encontrarlos. Esta vez el zorro aseguraba su supervivencia en un arbol, mientras que el otro animal parecia buscar simplemente sangre. No era natural buscar alimento, matar a un animal y poco despues ir a matar a otro. Eso no era marcar territorio y lo sabia, era mas que eso. Era un ser sangriento. Asi que, despues de todas las cosas que habia visto en mi vida, eso me parecia llevar a un claro ejemplo de mestizos o un espiritu animal descontrolado en un cuerpo que no entiende de razones. O simplemente un humano con forma animal.

-Lobo. Tu comida esta donde la dejaste, si no quieres morir de hambre te recomiendes que vallas por ella. Y si me entiendes...deja al zorro tranquilo.
Dije empuñando la daga con una mano y con la otra creando una bola de fuego. No sabia como me habia metido en ese lio sin mas. Pero tampoco me habria quedado agusto si no hubiese echo nada en absoluto. Ademas...seria curioso ver si en efecto eran o no mitad humanas o algo similar. Aunque por el sonido de los cascabeles del zorro me sonaba mas a un espiritu.

El zorro magico habia logrado esquivar mi ataque con mucha facilidad; en realidad co ello solo desee comprobar realmente su naturaleza, de haber sido un animal comun es mas que seguro que su reaccion hubiese sido otra. Aun asi este salio coriendo en otra direccion, escuchandose el sonido de un cascabel a medida que este se mueve; por mi parte unicamente segui sus pasos, a pesar que este borra sus huellas con sus colas yo podia seguirlo con la vista al estar a escasa distancia de el; pero busco altura y trepo un arbol para salir de mi alcance. En ese momento me le quede mirando, aun gruñendole a pesar de que no lo alcanzo, pero su vista se mantiene aun sobre la mia, eso es señal de estarme desafiando; aunque lo lo pareciera pero yo lo tomo como un desafio.

No iba a dejar que el zorro se me escapase; por lo que al igual que el me movi a gran velocidad, trepando por alguno de los arboles, saliendo de la vista del zorro por algunos segundos; pero reapareciendo luego en el extremo de la rama en donde este se encuentra; comenzando lentamente a acercarme hacia este, para asi poder arrinconarlo en contra del tronco del gran arbol. - ¿Y ahora quepiensas hacer, pequeño zorro ?- Dije en mis pensamientos mientras voy acercandome lentamente, hasta que me detengo al escuchar la voz de alguien mas; la mujer pelirroja que deje de lado en el rio hizo su entrada. En sus palabras es clara su amenaza, ademas de que lo demuestra al estar empuñando su daga y teniendo una bola de fuego en su otra mano; pero al no tener vestimenta alguna, es claro que no posee ninguna defensa para proteger su cuerpo, por lo que una mordida dada en el lugar preciso seria algo fatal. Si queria llamar la atencion, pues ya la tiene; mi vista cambio de direccion y se dirigio hacia la mujer, pero sin perder el rastro del zorro, tambien me encuentro al pendiente de el.

Tengo dos presas; pero debia elegir con cual puedo quedarme, aunque es mas que evidente que puedo primero hacer algo en contra del zorro ya que es la que tengo a menor distancia, pero si la pierdo es de seguro que me quedaria con la mujer ya que esta dispuesta a atacar ante cualquier cosa que haga. Fue en ese entonces que nuevamente volvi mi vista hacia el zorro y di un salto en su direccion para poder atraparlo, ya sea mordiendo una de sus patas o simplemente pudiendo agarrarlo de una de sus numerosas colas.

El miembro 'Inari' ha efectuado la acción siguiente: Lanzada de dados

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'Dado Numérico Random' :

Resultados : 6, 9, 5

Era misterioso como un animal asi podia buscar la muerte en los demas solo por diversion. Aunque si no era exactamente un animal podia entenderlo, siempre sucedia lo mismo. Algun loco sin cabeza y sin corazon, con un cerebro delirante y macabro deseaba la muerte de los demas. Quizas incluso habria matado a su familia tras caer en la locura y desesperacion.
Seres asi eran los que no tenian derecho a vivir. Monstruos o asi los llamaban, los causantes de la muerte de montones de seres de su misma especie. Y alli estaba, frente a mi decidido a luchar y a matar a las dos. Se podia ver en su cara el ansia por acabar con ambas. Vi su mirada centrarse en mi cuello como si fuera su unica idea y a pesar de todo me puse mas alerta de lo normal. Un animal, si sabia lo que queria podia ser peligroso, sobre todo si en mi caso no tenia armadura ni podia convertirme en dragon en aquel lugar. Despues de todo no estaba lejos de la ciudad mas cercana. Incluso con mi poder de piedra si el animal era lo suficientemente rapido no serviria de nada.

El animal se fijo en el zorro y acabo saltando sobre el, quien salto a mi lado mientras con magia proveniente de sus colas se transformo en una humana o algo similar. Asi que era un espiritu del bosque, o asi los conocia yo. Guardianes secretos, protectores en los bosques y las ciudades. Asi que, estando ahi, unida con un mismo cometido a la mujer zorro di un paso  hacia delante, pero esta vez usando mi voz mas grave draconiana y avise al animal, esta vez usando mi habilidad de intimidacion.
-Sabes que no acabaras bien en esta pelea, huye mientras puedas pequeño lobo o me hare un collar con tus tripas.

Dije dejando la daga en mi bolsillo y creando una bola de fuego con ambas manos. Despues de todo a los animales el fuego era lo que mas intimidaba.


off: tirada de intimidacion para que salga por patas.

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Resultados : 2, 6, 9

La cosa iba ahora mucho mas alla; por lo visto el zorro escondia lo suyo, ya que tras esquivar mi salto hacia ella, se dirigio para estar junto a la otra mujer y tomar forma semi-humana, conservando aun algunos rasgos de su forma anterior. Por mi parte solo descendi del arbol y mantuve mi mirada sobre ambas, pareciendo que ahora el zorro se oculta junto a la otra mujer que no deja de estar amenazante ante mi presencia; dejando su daga de lado al ver que quizas le seria inutil y concentrando sus fuerzas en la esfera de fuego que ahora esta creando con mayor fuerza al ahora utilizar sus dos manos para esto. Por mi parte seguia amenazante, manteniendo la distancia entre las dos, gruñiendoles y mostrandoles los colmillos al sentirme dominada por la naturaleza animal que habia logrando nuevamente adquirir pero seguia dominada por la bestia interior en ese momento en lugar de la forma humana con la que fui castigada por la Dama Sol por mi traicion a ella.

Cuando me iba a preparar para nuevamente atacar a las dos, algo me comenzo a suceder; de inmediato senti como si es que me estuviese quemando por dentro, mi cuerpo empezo a convulcionar y no podia nuevamente fijarme en las dos. Fue entonces que algo empezo a suceder, comence lentarmente a cambiar, dejaba atras el pelaje blanco que me cubria para comenzar a aparecer mi piel morena, mis orejas iban disminuyendo y el pelaje que me cubria empezaba a recojerse hacia la que es mi cabellera plateada; sin saberlo recuperaba mi forma humana nuevamente, dejaba de lado por alguna extraña razon mi verdadera forma para volver nuevamente a tomar la figura humana que tenia. En ese instante solo me desplome en el suelo completamente inconciente, viendome a la vista de los presentes completamente desnuda, sin nada encima que pudiera verse como si es que fuese algun arma o algo mas, solo mi cabellera logra cubir algunas partes de mi cuerpo, pero ademas de eso nada mas.

Fue raro ver como el animal enloquecido, tras mi actuar y el del zorro acabo en el suelo, moviendose de manera extraña. Finalmente y sin saber como, su cuerpo cambio siendo el de una mujer. Y al igual que yo misma parecia quedar completamente desnuda. La mira sin entender para despues acercarme con cautela y tocarle el palo para retirarselo de la cara.
-¿estas bien?...
Fue lo primero que dije al verla tirada. Generalmente me habria marchado, pero me parecia egoista en aquellas circunstancias. Asi que espere su respuesta o algun gesto que no fuese asesino.

La mire con curiosidad. No era un animal que se transformara en humano como yo o otros conocidos, mas bien parecia como si el animal se apoderara de su alma y la destrozase. Parecia agotada y machacada, y eso me sorprendio. Quizas una maldicion o algo similar. Quien sabe que fuese lo que sucedia a la joven.
Al rato pregunto y fue la otra chica la que respondio. Habia estado ausente unos segundos, probablemente por la intimidacion, esa misma intimidacion que por un tiempo habia liberado a la humana que se encontraba desnuda frente a mi. Por sus gestos parecia ser muy orgullosa, y que no estaba acostumbrada a recibir ayuda. Sin embargo no logre entender lo que dijo la chica zorro. Asi que la mire y volvi a mirar a la desnuda.
-Deberias preguntar menos y descansar mas. No tienes buen aspecto.
Dije sin mas tocandole un hombro. No lejos de alli habia dejado el animal muerto. Seguramente podriamos volver a usarlo para darnos una buena comida. Una hoguera, carne fresca y buena compañia. Si, era una gran idea. Ademas sus vidas me resultaban muy interesantes.

No era mi costumbre echar una mano a quien habia intentado matarme, sin embargo, al ver que se habia transformado todo podia ser diferente. Asi que me vi en la obligacion de ayudarla, o mas bien de ayudarlas a ambas. aunque una de ellas parecio poner malas caras a mis comentarios.

No tardo la mujer desnuda en levantarse, solo tapandose con sus cabellos. Para mi era algo normal aquello, aunque para muchos otros era algo inimaginable y lleno de pecado. Cuando por fin hablo asenti.

-Al oeste hay un claro donde podriamos acampar sin mucho problema. Y hacia el sur hay alguna cueva, aunque desconozco si estan vacias o no. Vosotras decidis.

Por mi no habria problemas, volveria a intimidar o permaneceria alerta continuamente. No era algo complicado para mi. Aunque tenia dudas de aquella chica que parecia poco amigable.Asi que fui directa.

-¿tienes una maldicion?¿ o que te ocurre? No es muy normal lo que te acaba de pasar y necesito saberlo si pretendo acampar contigo.

De ser una maldición a lo mejor la ataba o encerraba en algun lugar para que no dañase a nadie. Si no era nada de eso no me preocuparia

Fue decirlo y sin muchos problemas la joven acepto. Dejando claro que un campamento era la mejor opcion. Sonrei aceptandolo sin problemas, para preguntarla algo mas, intrigada por su forma de actuar.

Segun hablaba podia comprenderla mas, siendo el instinto animal algo complicado de controlar. Aunque no veia el cuerpo humano como un castigo. Gracias a el habia conocido a seres increibles, al igual que gente horrible. Siendo dragon el territorio a explorar se volvia pequeño e inseguro, pero siendo humana el mundo era entero para ti. Algo maravilloso a mi parecer.

-Me parece bien que vuelvas a controlarlo, pero deberias tener cuidado segun a quien atacas. Parecias solo desear la muerte y no la supervivencia. Eso es algo que ningun animal deberia hacer. Espera un momento.

Y tal como dije aquello me moví entre la maleza con gran agilidad. Perdiendome entre la lejania. No tarde mas de unos minutos, para volver con aquella presa de ciervo cargada en la espalda.

-Con esto tendremos para comer. Ahora sigueme hasta el campamento. Quizas el fuego aun siga encendido.

La dije esperando que me siguiera. Despues comence a andar hacia mi hoguera, alli donde estaban el resto de mis armas y mi ropa. Guiando a aquella mujer entre la espesura del bosque.

-Mi nombre es Enea. ¿el tuyo?

Dije avanzando con calma, hasta llegar al campamento y dejar el animal muerto en el suelo.

La pelirroja se separo de la inu por unos instantes, volviendo con una presa para las dos; luego siguio la carrera hacia un lugar que ella habia dicho que es su campamento, seguramente donde tendria algo listo, ademas de que quizas tendria sus cosas alli; no estaria todo el tiempo realmente desnuda. Por la inu no habia problema, si sus espadas se extraviaron mientras estuvo en su forma bestia; no costaria trabajo nuevamente encontrarlas, bastaria con llamarlas por su nombre para que automaticamente abandonaran el lugar donde se encuentran o a los seres que las estan portando para que volvieran con ella.

Comenzo a seguirla, siendo su guia hacia su campamento; escuchando toda su charla, incluso presentandose con el nombre de Enea. Por su lado no sabia realmente que decirle, si ella habia pasado por las tierras de la Dinastia Dragon, el que le dijera su verdadero nombre de inmediato le haria sospechar, pro el contrario no sabria nada si no habia escuchado halar de ella. - Mashu... ese es mi nombre.- Le dio una identidad falsa, en ese momento solo dijo el primer nombre que se le habia venido a la cabeza. De inmediato cuando llegamos pudo observar que no es la gran cosa pero servira para pasar un tiempo en su compañia, observando que las cosas ajenas se encuentran alla, ademas de los restos de una fogata. - Se ve que es un buen lugar, aqui nadie nos molestara ni podra vernos asi. Dos mujeres desnudas llaman bastante la atencion, pero no me molesta andar asi.- Le explico mientras busca un lugar donde poder sentarse, cercano al fuego. - Y tu Enea; ¿que haces por estos lares ?-

No tardamos en llegar al campamento mientras le contaba cosas con calma. Era bastante calmada y pacifica, aunque acababa aburriendome con facilidad de toda esa gente extraña. Luego ella se presento, aunque pude notar cierta duda en sus palabras. Probablemente habria usado un nombre falso como casi todo el mundo. Pero por mi parte no opinaba que ocultar un nombre siempre fuese lo mas adecuado. Tu poder residia en tu nombre, si lo cambiabas, perderias poder al renegar de el. Pero eso poca gente lo sentia.
Una vez nos sentamos porfin, comencé a calentar la carne para poder comer. Mientras la escuche hablar del aspecto de ambas y lo que podiamos llamar la atencion. Entonces la mire curiosa y me rei.

-Yo en cierto modo soy un animal, solo llevo ropa por respetar las creencias de los humanos y otras razas. Y en este lugar no creo que nadie tenga intenciones de venir. Cuando me acerque a la ciudad...ahi cambiare mi actuar, hasta entonces seguire libre.

La dije sin mas mirando la comida. PAra acabar cogiendo un poco de carne y comer con ganas y poca educacion.
-Yo simplemente viajo¿tu?

La inu solo se limito a escuchar el dialogo de la pelirroja, siendo una explicacion bastante conveniente para su propio beneficio, por su parte pasaria el tiempo desnuda igual que ella, teniendo exactamente la misma razon, pero a diferencia de ella que explico que es un animal, por su parte tambien lo es; con la diferencia que ella pertenece a las divinidades de la dinastia dragon, lo cual hacia que posea algo de divinidad, a pesar de haber sido castigada y desterrada al mundo de los humanos, donde mas bien aprovecho de la debilidad de esas criaturas para poder haber hecho muchas cosas terribles en el pasado.

- Ahora podria ser que ando de viaje, como estuve transformada en bestia por mucho tiempo nose que tanto me aparte del territorio de donde me encontraba ni en que reino puedo estar ahora.- Menciono para tomar algo de la carne que se asaba en el fuego y comer un bocado al igual como la otra chica lo hace. Sin ningun apuro, la chica lentamente cambio de lugar y se dirigio a sentarse junto a la pelirroja, comenzando lentamente a acercarse a su cuerpo, hasta unicamente quedar a escasos centimetros de ella.

- Y dime, ¿alguna idea de en que lugar nos encontramos ahora ?- Pregunto para tener una mejor orientacion con respecto a donde se encuentra, ya que a primera vista este bosque no le parecia para nada conocido y mucho los alrededores que habia logrado ver, siendo territorios y tierras completamente nuevas para la inu.

El hambre se apoderaba de mi mientras miraba la carne entre las llamas. Para finalmente poder agarrar un trozo de esa comida y comenzar a saborearla. Entregue comida a la mujer desconocida y segiu comiendo con muchas ganas. Sobre todo despues de buscar comida durante dias.

-Mmm...Asi que no sabes cuanto tiempo estuviste transformada...Pues solo puedo decirte que estas en un bosque en Asbru. Solo tu puedes averiguar si has estado mucho tiempo o no. Pero... deberias cuidarte mas con esas transformaciones. No creo que aporten nada bueno.

Le respondi viendo como se acercaba, supongo que para comer en mejor compañia.

-Pues a ser exactos, al noroeste, en un bosque cercano a las montañas y cerca de un pueblo. Pero no recuerdo su nombre exactamente.

La mire a la cara mirandola con curiosidad despues segui comiendo con calma.

- Tienes suerte de haber viajado transformada en bestia y que nadie te haya cazado o matado. Sientete afortunada. Aunque... desconozco como pierdes el control sobre tu forma bestia.